Jorge Miguel Peña, director de Mundo Laboral, recurre a la ironía para definir el estado de indefensión que asegura vivir en el polígono industrial ‘Nicomedes García’ de Valverde del Majano, y asegura que a partir de hoy llevará consigo una escopeta para defender su empresa del ataque de los delincuentes “igual que se hacía en el Salvaje Oeste”. En la mañana de ayer, al llegar a las instalaciones de su empresa, comprobó los cuantiosos daños materiales que causaron los delincuentes que accedieron a través de los tejados al interior de los talleres y oficinas de la empresa dedicada a la confección de ropa de trabajo y serigrafía.
Peña aseguró que los delincuentes debieron entrar pocos minutos después de que él mismo abandonara las instalaciones de la empresa, sobre las 23,00 horas, ya que advirtió algunos ruidos en el tejado que inicialmente atribuyó al viento. Una vez en las instalaciones, los ladrones dedicaron sus esfuerzos a buscar algún tipo de caja fuerte, revolviendo mesas, cuadros, sillones e incluso algunas de las máquinas de impresión y reprografía que cuenta la empresa para sus trabajos.
Aunque aún no han sido evaluados los daños, el director de Mundo Laboral considera que más que el montante económico que pueda derivarse, “lo peor es el importante trastorno que nos causa como empresa, ya que tenemos que seguir trabajando y atendiendo pedidos y presupuestos en condiciones muy precarias hasta que consigamos restablecer todo el sistema y recuperar la normalidad”.
Peña lamentó que esta situación “no es nueva”, y aseguró que otras empresas como Comercial Caupi —dedicada al comercio al por mayor de artículos de limpieza e higiene— o Clemente Román —que se dedica a la recuperación de maquinaria industrial—, han sido víctimas de la visita de los ‘cacos’ en los últimos días.
El empresario recordó que el polígono de Valverde suele ser objetivo habitual de los delincuentes, sin que en su opinión se haya recibido una respuesta eficaz por parte de las autoridades para paliar esta situación.
Por ello, los empresarios pasarán a la acción y a finales de esta semana —el viernes presumiblemente— una reunión con los responsables del Ayuntamiento de Valverde del Majano para buscar soluciones “inmediatas y efectivas” a este problema. Así, los empresarios plantearán la necesidad de cerrar durante la noche tres de los cuatro accesos que existen al polígono, así como contratar seguridad privada que filtre el acceso al recinto industrial y vele por la seguridad del entorno.
Además, insistirán en pedir a la Subdelegación del Gobierno que intensifique las medidas de seguridad a cargo de la Guardia Civil para proteger el polígono, aunque la experiencia de otros encuentros mantenidos con los representantes de la Administración central no hace ser especialmente optimistas de cara a una solución.
