La derrota en Los Pajaritos puso fin a la condición de invicta de la Gimnástica Segoviana, pero no a las buenas sensaciones que viene dejando el equipo de Iñaki Bea en el arranque de la temporada. En una categoría tan exigente como la Segunda RFEF, perder ante un rival como el Numancia, y hacerlo en los últimos instantes, puede entrar dentro del guion. Lo que no cambia, pese al tropiezo, es la línea competitiva de un conjunto gimnástico que sigue dejando motivos para creer.
La acción desgraciada de Pablo Carmona y que desembocó en el tanto de Jony fue un golpe duro, sobre todo por lo inmerecido del castigo, pero no puede tapar que la Segoviana volvió a ser reconocible en su propuesta: intensidad, carácter y voluntad ofensiva. Por primera vez en la temporada no logró ver portería, sí, pero no por falta de llegadas. Y eso, a largo plazo, cuenta.
A ojos de la clasificación, la Segoviana se mantiene en la cuarta posición con siete puntos en su haber, a cinco del liderato que comparten Deportivo Fabril y Real Ávila, ambos con pleno de victorias (cuatro de cuatro). Y es que, pese a la derrota en Numancia, una de las buenas noticias en clave azulgrana es que el equipo de Iñaki Bea aún conserva su plaza en zona de playoff de ascenso.
Ahora, la Segoviana buscará pasar página lo antes posible, y qué mejor escenario que La Albuera, donde presenta números impecables: dos victorias en dos partidos, cuatro goles a favor, ninguno en contra, y seis puntos de seis posibles. El próximo compromiso será este domingo a las 18:00 horas ante el Coruxo, décimo clasificado con cinco puntos, en una nueva oportunidad para reencontrarse con el triunfo y seguir construyendo en un camino que, pese al tropiezo en Numancia, sigue siendo ilusionante.
