El CD Quintanar regresó ayer de León tras encajar, en casa del CD Fútbol Peña, un 3-0 que se antoja demasiado abultado, ya que los segovianos controlaron el partido en el primer tiempo, creando ocasiones claras para marcar algún gol, pero sin suerte de cara a portería.
De esta manera, los chicos de Javier Jadraque perdonaron antes de irse al descanso, y ya en la segunda parte dos errores defensivos propiciaron los dos primeros tantos leoneses. El 1-0, un golazo desde el vértice del área tras una indecisión defensiva; y el 2-0, por medio de un lanzamiento de falta que no se despejó, y que acabó con un remate de Iván desde el segundo palo.
A pesar de todo, los segovianos no bajaron los brazos, incluso tras recibir el 3-0, con un penalti muy discutido por los visitantes.