Más de 300 vehículos fueron abandonados en los talleres de Segovia en el último año, lo que supone unas pérdidas de casi un millón de euros anuales para los talleres de la provincia si se tiene en cuenta los gastos de estacionamiento y reparación no abonados derivados de esta práctica cada vez más frecuente, según un estudio realizado por la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM).
De acuerdo con sus datos, en España se abandonan anualmente más de 75.000 vehículos en estas circunstancias.
Castilla y León fue, con más de 4.000 vehículos, la sexta comunidad española con mayor número de abandonos de vehículos en los talleres, por detrás de Cataluña (12.206), Madrid (7.624) y Galicia (5.722), entre otras. Esta tendencia supuso para los talleres de la región castellanoleonesa unas pérdidas de 11,5 millones de euros anuales.
En un análisis territorial, el estudio de Ganvam muestra que las provincias castellanoleonesas más afectadas por esta práctica fueron, por este orden, León, con un total de 1.168 coches; Burgos, con 721, Valladolid, con 717 y Salamanca, con 538 vehículos abandonados. Tras estas provincias se situaron Zamora (399), Segovia (369) y Palencia (369). Por su parte, las provincias de Ávila y Soria se sitúan a la cola, con 367 y 180 vehículos abandonados en los talleres, respectivamente.
Un problema crónico. Ganvam —que representa a más 5.000 empresas de la reparación y mantenimiento— explica en un comunicado que si bien el abandono de los vehículos en los talleres es un problema «crónico» del sector, en este último año se ha visto acentuado por la crisis económica, ya que cada vez son más los usuarios que no pueden hacer frente a su factura del taller o que sencillamente no encuentran rentable la reparación de sus viejos automóviles.
Y es que el retrato robot de estos automóviles se corresponde en el 90% de los casos con vehículos con un precio en torno a los miel euros y una edad comprendida entre los ocho y diez años. El importe medio de la reparación de estos vehículos ronda los 1.200 euros y supera muchas veces su valor de mercado, por lo que, rara vez suele compensar al usuario su arreglo.
Según la patronal, estos vehículos se abandonan en las instalaciones por un tiempo medio de unos tres meses que en ocasiones puede sobrepasar incluso los cuatro años, produciéndose situaciones tan peculiares como las protagonizadas por empresas en quiebra o matrimonios «mal avenidos» que prefieren que sus vehículos —generalmente de alta gama— corran mejor suerte en el taller.
En la actualidad, el taller es depositario de los vehículos que entregan los clientes y, como tal, tiene el deber de guardia y custodia, lo cual dificulta que pueda desprenderse de ellos transcurrido un periodo prudencial de tiempo. Por este motivo, los talleres optan por mantener los vehículos en sus instalaciones por tiempo indefinido con los «sobrecostes» que esto supone si se consideran los gastos de estacionamiento (unos 109 millones anuales) y reparación no abonados (unos 80 millones anuales), en total cerca de 190 millones de euros para los talleres españoles.
Hasta la fecha, las medidas que venían aplicando los talleres para la retirada de estos coches eran demasiado complicadas o poco efectivas, a través de la apertura de un procedimiento judicial para solicitar la subasta del vehículo cuando el importe de la factura es muy elevado o, directamente, el estacionamiento del automóvil en un aparcamiento o vía pública previa comunicación al propietario.
Con el fin de erradicar esta situación, Ganvam pidió una modificación de la Ley de Seguridad Vial, que entrará en vigor antes del verano y que obliga al propietario a retirarlo al desguace antes de un mes desde que Tráfico lo dé de baja.
