El primer ministro de Rusia, Dimitri Medvedev, anunció que el país dejará de importar frutas, verduras, lácteos, carne y pescados de la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá, Australia y Noruega, en respuesta a sus sanciones por la injerencia del Kremlin en Ucrania.
La prohibición a la importación de estos productos estará vigente durante un año, a contar desde ayer, tal y como estaba previsto, aunque algunos medios de comunicación rusos apuntaron que será revisable.
“No hay nada bueno en las sanciones, y no ha sido una decisión nada fácil de tomar, pero teníamos que hacerlo, no tuvimos mas remedio”, dijo Medvedev en la reunión ministerial que se celebró ayer.
El presidente ruso, Vladimir Putin, firmó un decreto para prohibir la importación de productos agrícolas y alimentarios de los países que aprobaron sanciones recientemente contra dirigentes y entidades rusas.
Además, el jefe de Estado ordenó al Gobierno que elaborara una lista de los productos que se verán afectados. El Servicio de Vigilancia Veterinario y Fitosanitario (VPSS) ya adelantó que las prohibiciones serían “sustanciales” para la Unión Europea y Estados Unidos.
“Estamos analizando el anuncio que ha hecho Moscú”, dijo en rueda de prensa el portavoz de la Comisión Europea, Frédéric Vincent. Una fuente comunitaria indicó a RIA Novosti que se trata de una decisión “contraproducente e injustificada”, aunque subrayó que los Veintiocho no darán a conocer su postura oficial hasta que se publique la lista definitiva completa de productos vetados.
Por su parte, el diario ruso ‘Kommersant’ informó de que Rusia planea prohibir también la importación de productos agrícolas y alimentarios de Ucrania. De confirmarse, las pérdidas económicas para este país podrían alcanzar los 1.300 millones de dólares (971 millones de euros) diarios, ya que se trata del mayor exportador de productos agrícolas a Rusia.
Latinoamérica
El VPSS también reveló que planea contactar con los representantes diplomáticos de varios países latinoamericanos para consultarles sobre la posibilidad de ampliar las importaciones de estos productos.
El VPSS añade que el Kremlin levantó todas las restricciones impuestas a las empresas brasileñas, que ya manifestaron su interés por ampliar sus exportaciones de productos cárnicos y lácteos al país euroasiático.
El presidente de la Asociación Brasileña de Proteínas Animales, Francisco Turra, afirmó que podrían enviar a Rusia hasta 150.000 toneladas adicionales de pollo al año, de acuerdo con la agencia Reuters.
