Aviones de combate de la coalición internacional liderada por Arabia Saudí han acabado con la vida, según testigos, de entre ocho y diez civiles la madrugada del viernes en la capital de Yemen, Saná, que se encuentra bajo control de los rebeldes huthi, enemigos de las fuerzas aliadas.
Según la agencia oficial Saba, ahora bajo control huthi, es posible que la cifra de muertos se haya elevado a 20 e incluso más, entre ellos mujeres y niños, y tiene constancia de más de 50 heridos.
También fue atacada una base aérea de la capital mediante un grupo de aviones de combate.
Por otra parte, varias tropas saudíes lograron repeler un ataque masivo de los rebeldes huthi de Yemen en su frontera, en lo que se trataría del primer gran asalto de los insurgentes contra el país vecino. El cual, lidera una coalición internacional contra ellos, desde el inicio de la guerra, según informó en una nota la agencia oficial de noticias saudí SPA
Muertes masivas
Según informaciones no confirmadas que recoge la cadena inglesa de noticias BBC, “decenas” de rebeldes podrían haber muerto en este último asalto, que tuvo lugar el pasado jueves sobre Najran, en la frontera sur.
Los rebeldes, que controlan gran parte del norte de Yemen, incluyendo la capital, Saná, llevan meses luchando contra el Ejército y desde el pasado mes de marzo son bombardeados regularmente por la coalición al frente de la cual se encuentra Arabia Saudí.
Más de 1.200 personas han muerto en Yemen en las últimas seis semanas y otras 300.000 han tenido que abandonar sus hogares a causa de la violencia, según ha denunciado el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, quien manifestó su “grave preocupación” por el hecho de que continúen los enfrentamientos armados y bombardeos en el país árabe.
A través de un comunicado, Ban Ki Moon denunció que hay familias en Adén que han quedado “atrapadas” entre los bombardeos y los ataques de los francotiradores, que disparan a ciudadanos indefensos en plena calle.
