La reciente subasta de un solar de titularidad municipal en Encinas, ubicado en el emplazamiento donde se alzaba la antigua fragua del pueblo, ha generado un notable malestar entre algunos vecinos, que critican la falta de transparencia del proceso y la pérdida de un bien que consideran de valor simbólico para la comunidad.
El anuncio de enajenación del solar, con un precio de salida fijado en 2.210 euros hizo que los vecinos dieran la voz de alarma, ya que este se había publicado en el tablón físico del Ayuntamiento y no en la sede electrónica ni a través de los canales de difusión habituales, como la lista municipal de WhatsApp utilizada frecuentemente por la alcaldesa. Según señalan numerosos residentes, se enteraron del procedimiento una vez vencido el plazo de presentación de ofertas, lo que ha levantado dudas sobre la voluntad real de informar a la ciudadanía.
Y es que el espacio en cuestión, más allá de su valor económico, es percibido como parte del patrimonio histórico y cultural del municipio, al haber albergado durante décadas la antigua fragua, un lugar de referencia para generaciones de vecinos.
Consultada sobre las razones de esta enajenación, la alcaldesa socialista Lourdes Cristóbal Antoranz explicó que responde a la necesidad urgente de liquidez, debido a que los ingresos por tributos del Estado permanecen retenidos al no haberse presentado las cuentas públicas correspondientes desde el ejercicio 2023. Según sostienen los vecinos, conscientes de la escasez de recursos económicos en el municipio en el actual mandato, se ha prescindido del cobro de las tasas municipales de agua y el impuesto de circulación de vehículos, una de las principales fuentes de ingresos municipal. Por ello, consideran que lo obtenido por la venta, es una cantidad “insignificante” para resolver los problemas económicos del pueblo: “Esto pone de manifiesto una preocupante falta de gestión financiera”, aseguran
La operación, ordenada por Decreto de Alcaldía, ha sido percibida por parte de la ciudadanía como “una decisión unilateral y poco justificada, que afecta directamente al patrimonio colectivo”.
En respuesta, un grupo de vecinos ha convocado hoy una concentración frente al Ayuntamiento a las 11:00 horas, con el objetivo de exigir la paralización del procedimiento y reclamar mayor transparencia, participación ciudadana y una gestión más rigurosa y proporcionada de los recursos públicos. Además, la preocupación por sucesivas ventas del patrimonio municipal mantiene en alerta a los vecinos del municipio, que temen por “la pérdida progresiva de bienes comunes sin el debido debate ni control”.
