Hace no demasiado tiempo, a un político inglés llamado Harold McMillan se le ocurrió pronunciar en la cámara de los lores del Reino Unido la siguiente frase: “Deberíamos usar el pasado como trampolín y no como sofá”. Evidentemente, poco tenía que ver la expresión del político británico con el fútbol, pero su reflexión bien vale para definir el partido que a partir de las seis de la tarde de hoy medirá a la Gimnástica Segoviana con el Arroyo CP en el campo municipal de La Albuera.
El pasado como trampolín y no como sofá. Eso debe usar el conjunto azulgrana ante su rival extremeño, al que derrotó por 1-2 en el partido de ida, un marcador positivo, pero en ningún caso definitivo, y así lo valoró Paco Maroto en la previa del encuentro, “ya que el marcador favorable puede ser el más positivo para nuestra manera de jugar, y el más negativo para Arroyo cuenta con armas suficientes como para complicarnos mucho la eliminatoria como no sepamos hacer bien nuestro trabajo”.
La historia de la Segoviana en las fases de ascenso ha sido excesivamente cruel con los azulgrana, y por ello no existe ni un asomo de confianza en las palabras del entrenador azulgrana, que durante la semana de entrenamientos recibió la buena noticia de la entrada a pleno rendimiento de Alex, restablecido de su rotura de uno de sus dedos del pie, con lo que toda la plantilla está a plena disposición del técnico, “una gran noticia a estas alturas de la temporada”.
El rival necesita marcar dos goles en La Albuera, algo que sólo han conseguido dos equipos (Ponferradina B y Arandina) en toda la temporada, y por ello Maroto considera que su oponente saldrá a por todas en los primeros minutos, “tratando de hacer un gol que ponga la eliminatoria un poco más igualada y nos traslade a nosotros los nervios”. Por ello el entrenador gimnástico aboga por “mantenernos fieles a nuestras señas de identidad, saltando al campo con toda la intensidad que podamos en nuestro juego para evitar ser sorprendidos”.
El once que pondrá en juego la Segoviana podría no diferir mucho del que saltó al Municipal de Arroyo de la Luz el pasado fin de semana, aunque podría haber variaciones en la mediapunta, con la entrada de Roberto para tener más posesión del balón. Anel se recuperó de su golpe en un costado y será fijo en la medular junto a Ricardo, echando una buena mano a la línea de cuatro defensas, que tendrán que vérselas con jugadores tan hábiles como Carralero y Carlitos, que llevaron mucho peligro en el choque de ida.
Se prevé que un buen número de aficionados extremeños, cerca de dos centenares, se acerquen hasta el campo de La Albuera. Habrá que ver si la afición segoviana les supera en número.
