La próxima semana está prevista una reunión en Segovia entre representantes de la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Junta de Castilla y León y técnicos de la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Segovia para abordar correcciones necesarias en el Plan Especial de Áreas Históricas (PEAHIS). El director general, Enrique Saiz, asegura que los técnicos municipales conocen ya cuáles son las deficiencias que se han detectado en la Consejería y pueden trabajar en ellas, aunque indica que desde el consistorio segoviano se ha solicitado un informe que recoja y recopile “todo lo que se ha pedido”.
Saiz se ha mostrado sorprendido con las declaraciones del concejal de Urbanismo, Alfonso Reguera, en medios locales, de las que parece desprenderse que no se pueden resolver alegaciones al PEAHIS porque el Ayuntamiento no dispone de ese informe.
El director general, que asegura que hay buena relación con el –Ayuntamiento de Segovia, explica que no puede entenderse un retraso achacable a Patrimonio, que eso “no responde a la realidad” y recuerda que el PEAHIS iba a someterse al dictamen de la Comisión de Patrimonio Histórico de Castilla y León el pasado mes de febrero pero fue el Ayuntamiento el que pidió más tiempo y lo retiró.
Comenta Saiz que se trata de un plan que atañe nada menos que a las áreas históricas de una ciudad Patrimonio de la Humanidad, donde el dictamen de la citada comisión “no es un mero trámite” y añade que “si tuviera que producirse hoy sería negativo”.
Técnicos del Ayuntamiento y de la Consejería llevan trabajando en el documento desde el pasado mes de enero y manteniendo encuentros periódicos, según la Dirección General de Patrimonio Cultural.
La misma fuente ha informado de que las deficiencias a subsanar se han detectado principalmente en el Catálogo como, entre otros, ya advirtió la Academia de Historia y Arte de San Quirce. Por otra parte, hay más de veinte unidades de intervención previstas en el PEAHIS que no están justificadas suficientemente, según el director general, en aspectos como alineaciones o alturas, “cuestiones que no son baladí”, indica Saiz, quien por otro lado considera que “la filosofía del plan sí es aceptable”.
Para este alto cargo de la Consejería de Cultura —que además lleva en la dirección general desde 2003 con distintos consejeras— lo fundamental es “trabajar conjuntamente para que el documento final tenga menos alegaciones.
Recalca que el equipo de Gobierno municipal decidió publicar el plan tras su aprobación inicial y someterlo a exposición pública para que se presentasen alegaciones y lo que ha pasado es que ha recibido cerca de dos centenares, algunas con cierto peso como las presentadas por San Quirce, el Colegio de Arquitectos o Izquierda Unida. “Los técnicos dicen que hay muchas cosas por mejorar”, resume Saiz.
comisión en julio El responsable de Patrimonio Cultural en el Gobierno autonómico no cree que el dictamen de la Comisión pueda producirse en la sesión que ésta celebrará el próximo julio y aunque no es descartable la convocatoria de una sesión extraordinaria “depende del Ayuntamiento de Segovia”, dice. “Dudo que en esa fecha —finales de julio— estén resueltas todas las cuestiones planteadas”, concluye.