A la vista de la evolución del episodio de inundaciones que comenzó el pasado fin de semana en la provincia y de la disminución del número e importancia de las incidencias registradas ayer, el delegado territorial de la Junta en Segovia, Javier López-Escobar, declaró finalizada la ‘situación 1’ de emergencia del Plan de Protección Civil ante el Riesgo por Inundaciones (INUNCyL).
No obstante, y ante el posible aumento de temperaturas en los próximos días, que podría tener como consecuencia deshielo, continúa la vigilancia en toda la provincia. Además, la Agencia de Protección Civil de la Junta de Castilla y León mantiene la declaración de alerta en toda la comunidad autónoma.
El suceso más grave que se produjo ayer en Segovia tuvo lugar en Madrona, donde los bomberos de Segovia rescataron a un varón que había quedado atrapado en el interior de su turismo al anegarse parcialmente de agua el habitáculo del vehículo mientras circulaba por un camino secundario que une las localidades de Madrona y Valverde del Majano. Según informaron a Europa Press fuentes del Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León, fue el propio conductor quien contactó con el centro de emergencias a las 15,59 horas para solicitar ayuda al comenzar a inundarse su vehículo mientras trataba de superar un cauce de agua, sin que requiriese asistencia sanitaria. En la intervención trabajaron los bomberos de Segovia, así como agentes de la Policía Local de la capital y del Cuerpo Nacional de Policía.
Caudales
De acuerdo con la información hidrológica facilitada por la Confederación Hidrográfica del Duero, en la provincia de Segovia se encontraban ayer en situación de alarma, pero con tendencia de bajada de los caudales, el río Duratón en la estación de aforo de Las Vencías, y el río Eresma en las estaciones de aforo de Segovia, Bernardos y Coca. Por otra parte, el río Eresma en las estaciones de aforo de Valsaín y salida de Pontón Alto se encontraba en situación de alerta, con tendencia de subida del caudal.
Por lo que respecta al estado de las carreteras, la Diputación reabrió ayer, a las 08,00 horas, la carretera SG-V-3122, que permanecía cortada desde el domingo entre los kilómetros 2,0 y 2,3, en Hontanares de Eresma.
Horas después, a mediodía, la Diputación procedió también a reabrir el tráfico en la carretera SG-3312, kilómetro 6, en Carbonero de Ahusín, la única de la red viaria provincial que permanecía aún cerrada por la crecida de los ríos.
“Ahora habrá que esperar a que pasen las lluvias para ver cómo han quedado los caminos rurales”, declaró ayer el presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, quien recordó que la institución cuenta este año con una partida de 200.000 euros para el arreglo de caminos, una cantidad que previsiblemente se deberá dedicar al arreglo de los daños ocasionados por estas inundaciones. Además, reconoció que el presupuesto habilitado en 2013 para el mismo fin (400.000 euros), no ha podido ejecutarse en su totalidad, al obligar las lluvias otoñales a retrasar diversas obras. Por último, Vázquez aplaudió el esfuerzo realizado estos días por los trabajadores de Acción Territorial para minimizar los perjuicios a los ciudadanos.
El PSOE pide regulaciones
El PSOE ha instado al Gobierno del PP a regular el margen izquierdo del río Duero para evitar inundaciones, pérdidas en la agricultura y daños medioambientales, así como garantizar el abastecimiento para el consumo humano y la agricultura.
El secretario general del PSOE en Segovia, Juan Luis Gordo, ha asegurado que “las fuertes y continuas lluvias de las últimas semanas y el rápido deshielo han mostrado, de nuevo, problemas estructurales en la regulación de los caudales”, agregando que los socialistas presentaron una enmienda en los Presupuestos Generales del Estado para 2014 para acometer esta regulación, denunciando que el PP “no apoyó ese texto”.