El San Cristóbal cerró la temporada en la Segunda División B de fútbol sala con una derrota con sabor a orgullo frente al Leis Pontevedra (3-4), en un encuentro disputado en el pabellón segoviano donde los locales ofrecieron una gran imagen pese al resultado. El choque sirvió para poner el broche final a un curso en el que el equipo dirigido por Diego Gacimartín logró con varias jornadas de antelación el objetivo de la permanencia.
Con un pabellón entregado, el San Cristóbal saltó a la pista con la intención de despedirse con una alegría ante su afición. Sin embargo, fue el conjunto gallego quien golpeó primero. Lejos de venirse abajo, los segovianos reaccionaron con carácter y calidad, logrando darle la vuelta al marcador gracias a los tantos de Edu Cubero y Álex Velasco.
Ya en la segunda mitad, el Leis Pontevedra, obligado a ganar para proclamarse campeón, impuso su ritmo y eficacia ofensiva para anotar tres goles más y colocarse 2-4. Pese a ello, el San Cristóbal no se rindió y apostó por el juego de cinco en los últimos minutos, logrando acortar distancias con un tanto de Samuel González a falta de dos para el final. El empuje local encontró como principal obstáculo al portero visitante, que con varias intervenciones decisivas evitó el empate.
El pitido final selló el triunfo gallego y el título de liga para el Leis Pontevedra, mientras que el San Cristóbal despidió la temporada con la cabeza alta, dejando buenas sensaciones y el trabajo bien hecho tras lograr el objetivo de seguir una campaña más en la categoría.
