Fe y acierto son las dos premisas innegociables a las que se agarra la Gimnástica Segoviana en estas cinco finales restantes para tratar de abrazarse a la ansiada permanencia en Primera RFEF. Una situación delicada, en cuidados paliativos, con la salvación a seis puntos de distancia, ante la que el equipo azulgrana buscará poner cura en casa. Porque el conjunto segoviano afronta en esta recta final dos encuentros consecutivos en un campo municipal de La Albuera que, desde que arrancó el año, lo dio la espalda, pero que de su recuperación en forma de victorias viven ahora las ilusiones gimnásticas para lograr el objetivo.
La primera prueba de fuego será este mismo domingo cuando, a partir de las 12:00 horas, la Segoviana reciba la visita del Barakaldo. “Estamos en un escenario complicado, pero tenemos un reto precioso por asumir. Hay que sacar mucho en los cinco partidos que quedan y vamos a intentarlo”, confesó el técnico segoviano, Ramsés Gil, en la previa del duelo ante un equipo vasco al que reconoció “tener envidia sana. Son un equipo recién ascendido, que empezó haciendo las cosas muy bien, ahora llevan un bache de resultados que no de juego que no habían tenido en toda la temporada, pero viéndoles jugar siguen con las mismas credenciales”.
Acerca de las virtudes del conjunto dirigido por Imanol de la Sota, Ramsés Gil lo tildó como “un equipo intensísimo, muy agresivo y trabajado, en el que destaca el bloque y con jugadores de mucha calidad que les ha llevado a estar peleando por el playoff de ascenso hasta a falta de cinco jornadas”. Una ausencia más que notable en el Barakaldo en este segundo tramo del curso es la salida de un Maroan Sannadi rumbo a Primera División con el Athletic Club sobre la que el entrenador gimnástico señaló que “junto a Fer López en Vigo eran los dos jugadores más determinantes de la categoría”.
Sobre las claves de sacar tres puntos de oro que den oxígeno a la Segoviana, Ramsés Gil aseguró que “el objetivo es competir igual de bien que contra el Celta Fortuna. En ese sentido, hasta diciembre, salió muy bien a nivel de resultados, pero se nos torció y nos ha llevado a una situación difícil que afrontamos con toda la ilusión del mundo para intentar llevarnos una alegría el domingo y meternos en la pelea”. Además, sobre dicha coyuntura, el técnico azulgrana añadió que “todo el mundo está triste por perder, pero de ahí a que el vestuario esté bajo de moral o de confianza va un mundo”.
Por último y, acerca de la importancia de La Albuera, Ramsés Gil concluyó que “necesitamos ganar partidos para llegar al último con opciones de poder mantener la categoría. Estamos convencidos de tener capacidades para sacar esta situación y, para eso, nos va a hacer falta la gente de Segovia. ¿Un mensaje? Que tengan fe y confianza porque lo vamos a pelear hasta el último día. No nos están saliendo las cosas como nos gustaría, pero esto es fútbol. Queda tiempo para buscar ese acierto que nos vuelva a enganchar en ese pelea empezando por los dos partidos en casa y los digo que la mantengan porque si hay algo que ha demostrado la Gimnástica en su historia es eso”.
