El buen tiempo que reinó en la provincia a lo largo de todo el día de Viernes Santo propició, tal y como estaba previsto, una alta afluencia de público a los actos religiosos que se celebraron en la calle.
Una de las principales novedades de este año ha sido la salida en procesión, por vez primera, del Señor de la Paz y la Concordia, que portaron a hombros los miembros de la Hermandad de la Paz en el vía crucis celebrado en la mañana de Viernes Santo desde Palazuelos de Eresma a Tabanera del Monte. Dicha imagen, realizada por un artista sevillano, ha sido recientemente bendecida por el obispo de Segovia, César Franco, en un acto en la Catedral. En el vía crucis de Viernes Santo, la imagen estuvo acompañada por otra, de la Virgen. El desfile contó con la participación de la banda de cornetas y tambores de La Flagelación del Señor, del barrio de Nueva Segovia.
En Cantimpalos, los vecinos expresaron su religiosidad durante todos los actos de Viernes Santo, incluyendo la procesión de los pasos, en la que los mayordomos de la cofradía lucían capa castellana y sus esposas mantilla. Seguidamente, la talla de la Virgen Dolorosa, acompañada solo por hombres, fue lleva a su ermita, mientras los asistentes cantaban la salve.