Uno de los principales proyectos de Urbanismo y Patrimonio en los que actualmente se halla embarcado el Ayuntamiento de Segovia es el de la construcción del Centro de Interpretación del Acueducto. Se trata de una iniciativa heredada por el anterior equipo de Gobierno municipal, pero que ha sido en los últimos meses, con la administración actual, cuando se han dado los pasos más importantes para llevarlo a cabo. El proceso para que puedan dar inicio las obras de este edificio ha sufrido algunos imprevistos relacionados con el lugar de su emplazamiento, lo que ha provocado que aumente sus costes y sus plazos. Pero, finalmente, parece que por fin va a ver la luz, tal y como anunciaba el alcalde de Segovia, José Mazarías, el pasado jueves, 27 de marzo.
El Centro de Interpretación del Acueducto y la Cultura del Agua se ubicará en el espacio ubicado entre la Plaza Oriental y el Paseo Santo Domingo de Segovia. Es decir, al lado del monumento en cuestión. La superficie del espacio público que ocupará es de 1.320 metros cuadrados y el edificio, con una previsión de hasta 2.350 metros cuadrados, contará, entre otras dependencias, con recepción, sala de información, sala de exposiciones temporales, y permanentes, salas de conferencias, espacios multiusos, tienda y cafetería. Todo ello se tratará de integrar en el entorno sin afectar a las vistas, mientras que las cubiertas tendrán como objetivo garantizar la viabilidad del espacio libre sobre rasante.
INVERSIÓN Y OBRAS
Aunque en un primer momento el Ayuntamiento de Segovia había hecho una primera estimación de 4,4 millones de euros de coste del proyecto, finalmente anunció que la cifra ascendía a un total de 5.285.514 euros. Una cantidad que, eso sí, llegará a través de fondos europeos ‘Next Generation’. La obra, según comentaba el alcalde de la ciudad tras la última Junta de Gobierno Local, será posible gracias a la aprobación, en la comisión bilateral celebrada entre el Consistorio y la Junta de Castilla y León, con la participación también del Ministerio de Turismo y Comercio, de la modificación de la actuación: “Lo que hemos hecho es modificar su alcance una vez que el Ayuntamiento tiene en su mano el proyecto de ejecución”, aclaraba Mazarías.
Así, explicó que la estimación del anterior Equipo de gobierno era de 2.677.122 euros, “lo que supone casi un 50% menos de lo que realmente vale”. En este sentido, realizaron una modificación “a mayores”, que viene dada por la inclusión de llevar a cabo un muro de contención “que aguante los espacios adyacentes para mayor seguridad” y, además, se proyectó una cubierta de uso público urbanizada “que no causara ningún tipo de perjuicio visual en el entorno del acueducto”.

Hasta ahora, detalló el alcalde, las condiciones de la ayuda era que el edificio estuviese terminado en agosto de 2026 y, con dicha modificación, se dio autorización a que solo tiene que estar terminado a esta fecha la cimentación, los muros de contención y la estructura del inmueble “para que se pueda mantener la ayuda en su totalidad”.
La obra empezará “de forma inmediata”, afirmó Mazarías y como resultado, el Centro de Interpretación del Acueducto será un espacio “adecuado” y cercano al monumento. Se construirá, según avanzó, bajo rasante, en una localización “indicada” para que visitantes, familias y colegios puedan acudir y entender cuál era el uso del Acueducto, su historia y estado actual de conservación “con un contenido museístico interesante”, concluyó el alcalde de Segovia.
EL PROYECTO
El proyecto del Centro de Interpretación del Acueducto y la Cultura del Agua fue incluido dentro del proyecto ‘Segovia Fluye’, que fue presentado dentro de la segunda convocatoria extraordinaria del Plan de Sostenibilidad Turístico de Destino 2022 por PSOE e Izquierda Unida durante el anterior mandato del Ayuntamiento. Una iniciativa que tenía el objetivo de renovar el modelo turístico de la ciudad mediante la financiación de los fondos europeos ‘Next Generation’.
Una vez la administración popular entró en el Gobierno municipal a mediados del año 2023, decidió continuar con el proyecto, asumiéndolo como propio, tal y como anunció el actual concejal de Urbanismo y Patrimonio. Eso sí, el edil advertía de las dificultades que supondría el emplazamiento elegido, así como de cambios en la normativa urbanística para que el centro fuera una realidad. Esto debido a que la obra requeriría intervenir bajo rasante para aprovechar las diferencias de nivel existentes, además de que debía tenerse en cuenta las posibles conexiones con la prolongación del trazado de la calle Gascos hasta su conexión con la plaza Oriental.
Concretamente, las normativas que hubo que revisar para ordenar la zona donde llevar a cabo el proyecto fueron el Plan General de Ordenación Urbana, cuya modificación se aprobó en diciembre de 2023, y el Plan Especial de Áreas Históricas de Segovia (Peahis), a la que se dio luz verde en febrero de 2024. Solo un mes después, el Ayuntamiento anunciaba la salida a licitación de la redacción del proyecto, con un presupuesto base de licitación de 129.750,08 euros y un plazo de ejecución de tres meses una vez adjudicados los trabajos.

Además, el pasado mes de diciembre el Ayuntamiento de Segovia presentó el borrador del proyecto del Centro de Interpretación del Acueducto a varios colectivos afectados por esta iniciativa. El concejal de Urbanismo y el equipo redactor les explicaron cómo quedará integrado en el entorno este centro y recogieron, al mismo tiempo, propuestas e iniciativas. Una reunión en la que estuvieron presentes representantes de la asociación de vecinos ‘Justo y Pastor’ del barrio de el Salvador, de los Colegios Oficiales de Arquitectos, de Arquitectos Técnicos y Aparejadores y del de Peritos e Ingenieros Técnicos Industriales, así como de la Asociación de Amigos del Patrimonio.
LA CASA DE LA MONEDA
La realización de este proyecto supone acercar, de manera significativa, el Centro de Interpretación del Acueducto al propio monumento, ya que actualmente se encuentra en la Real Casa de la Moneda. Algo que, por otro lado, no es casualidad, ya que ambos edificios guardan una relación que se remonta a siglos atrás. Y es que en la Casa de Moneda se acuñaron monedas que llevaban el Acueducto como una de las marcas de seguridad, primero en la ceca de Enrique IV y más tarde en el Real Ingenio, construido por Felipe II en 1583. Algo que hizo posible que el monumento segoviano diera la vuelta al mundo y se convirtiera en el emblema de la ciudad.
Este Centro de Interpretación se trata de un moderno espacio interactivo y multimedia que cuenta con códigos QR y realidad aumentada que logran una inmersión más completa al Acueducto romano. El espacio incluye tres dioramas con representaciones tridimensionales que permiten al espectador sumergirse en la construcción del acueducto: el azud del acueducto, que era el lugar de la captación del agua; las canteras: que era donde se extraía el granito para los sillares: y la propia construcción del acueducto desde el pilar 105 al 115, con casi un centenar de obreros.

También este centro alberga la escultura original de la Virgen del Acueducto, que ocupó una de las hornacinas del monumento desde 1520 hasta el 2015. Esta obra, de 1,86 metros de altura y cerca de 800 kilos, fue donada por Antonio de la Jardina, un ensayador de la antigua Casa de Moneda ubicada en el corralillo de San Sebastián. La segunda hornacina del acueducto estaba ocupada por una escultura de San Sebastián, patrón de los monederos en Segovia. Ambas estatuas pueden contemplarse aquí a través de la realidad aumentada. Además, la exposición incluye un audiovisual ambientado en el año 1520, cuando la Virgen fue colocada en la hornacina del Acueducto.
De momento no se ha especificado qué sucederá con este espacio una vez se inaugure el nuevo Centro de Interpretación del Acueducto y la Cultura del Agua de la Plaza Oriental.
