Tras ver desvanecido el sueño europeo de disputar la final de la ‘Champions’ en el Bernabéu, el Barcelona se juega hoy la Liga en El Madrigal, donde no puede fallar si desea mantener intactas sus opciones de revalidar el título, aunque le espera un oponente crecido que lucha por entrar en Europa.
A falta de cuatro jornadas para el final, el conjunto azulgrana mantiene un punto de ventaja respecto al Real Madrid, que recibe mañana a Osasuna. Un empate o una derrota de los de Guardiola ante el Villarreal, combinada con un triunfo blanco, daría la vuelta a la clasificación.
El Barça, que el pasado miércoles cayó eliminado ante el Inter en las semifinales de la Liga de Campeones, ha intentado rearmarse anímicamente en los dos últimos días para afrontar una nueva final, esta vez ante uno de los rivales que peor se le ha dado en los últimos años tanto fuera como en casa.
Sin ir más lejos, los amarillos son el único equipo que, este año, ha sacado algún punto del Camp Nou (1-1). Y, la pasada temporada evitó que los catalanes ganaran la Liga en su estadio (3-3). En Villarreal, el bloque ‘culé’ ha sufrido más derrotas que victorias en los últimos 10 años, donde han ganado cuatro veces, perdido cinco y empatado una vez.
El conjunto azulgrana viajará hoy a tierras de la Comunidad Valenciana sin los lesionados Andrés Iniesta y Eric Abidal y con la duda de Xavi Hernández, que ha entrado en la convocatoria pese a arrastrar molestias en el sóleo de la pierna izquierda.
Guardiola recupera, no obstante, a Carles Puyol, baja ante el Inter por sanción y que formará pareja en el eje con Gerard Piqué. Dani Alvés y Maxwell, en los laterales, completarán la línea defensiva.
Si finalmente Xavi no está en el once, el Barça presentaría en El Madrigal un centro del campo mucho más físico de lo habitual, con Sergio Busquets y Touré Yaya por detrás de los tres medias puntas: Pedro, Messi y Keita.
Habrá que ver si el técnico catalán vuelve a confiar en Zlatan Ibrahimovic como referencia arriba después de su discreto partido ante el Inter o da entrada a Thierry Henry o al joven Bojan Krkic.
Buena racha
El entrenador del conjunto local, Juan Carlos Garrido, no piensa introducir variaciones en el once inicial, ya que es consciente que llegan al partido en el mejor momento deportivo y clasificatorio de la temporada para el ‘submarino amarillo’.
Una buena racha le ha llevado a ganar cinco de los últimos seis encuentros disputados, por lo que el Villarreal arroja una estadística como local impoluta, ya que desde la llegada de Garrido al banquillo el equipo ha ganado todos sus encuentros como local.
Una trayectoria que ha propiciado la opción de volver a las plazas europeas e, incluso, la de luchar por alcanzar los puestos de Liga de Campeones.
Para este encuentro, el técnico valenciano ha tenido que descartar a dos jugadores, en este caso Robert Pires e Iván Marcano, aunque la nota más destacada ha sido la vuelta al grupo del internacional español Marcos Senna, que el jueves ya indicó que se encuentra en plena forma.
Con todo y respecto al once inicial solo se baraja una duda y ésta radica en la presencia y vuelta al equipo de Santi Cazorla, lo que dejaría en el banquillo a uno de los tres delanteros que viene jugando habitualmente, con más posibilidades para que el ausente sea Joseba Llorente.
