El presidente de esta federación provincial, Juan Bautista Mullor, explica que los representantes de las asociaciones de la capital segoviana “consideramos que no es el momento adecuado para aumentar las tasas, debido a la recesión económica”. Este dirigente del movimiento vecinal añade que el Ayuntamiento debería tener en cuenta el incremento de la cifra de pardos, así como la no revalorización de las pensiones, así como la congelación de los sueldos de los empleados públicos y la eliminación de una de las pagas anuales a estos últimos.
Ante esta situación, Mullor sostiene que lo más razonable hubiera sido mantener o reducir tasas e impuestos “para incentivar el consumo, porque en este momento solo el aumento de la demanda de productos y servicios puede ser el motor que dinamice la economía para salir adelante”. Por el contrario, añade, “tirar del bolsillo de los vecinos es contraproducente”.
Todas las tasas, impuestos y precios públicos que cobra el Ayuntamiento de Segovia subieron desde el pasado martes, 1 de enero, un 2,7 por ciento, tomando como base el Índice de Precios al Consumo (IPC).
Por el cobro de las 28 figuras impositivas —14 tasas, 8 precios públicos y 6 impuestos— el Ayuntamiento de Segovia espera recaudar este año algo más de 34 millones de euros, un aumento de ingresos con respecto a 2012 de un 4,29 por ciento.
El presidente de la federación asegura que sus responsables mantienen una relación “fluida” con el equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Segovia, “lo que no significa que no nos gusten algunas cosas que se hacen en la corporación, tanto en quien gobierna como en la oposición, porque los grupos se comprometieron a elaborar un nuevo reglamento de participación ciudadana y pasa el tiempo y no sabemos nada, si se ha comenzado o en qué momento se encuentra su tramitación”.
Por otro lado, Mullor afirma que “seguimos reivindicando que se convoquen los foros de participación por parte del Ayuntamiento, cuanto antes”. Estos foros nacieron como un vehículo a la participación de los vecinos en los asuntos municipales durante la primera legislatura de Pedro Arahuetes como alcalde. Sin embargo, según este dirigente vecinal, se convirtieron en otra cosa, en unas reuniones en las que los representantes de las asociaciones eran informados sin darles oportunidad de aportar sus ideas o iniciativas.
Por eso Mullor insiste en que se convoquen los foros de participación cumpliendo el reglamento en vigor y como vehículos de una participación real, “como reconoce la propia Constitución en los artículos 9.2 y 23”.
Así mismo, desde la federación, recuerdan “la labor callada que realizan día a día las asociaciones, ayudando y asesorando a los vecinos en particular y a muchas comunidades de vecinos”.
Crisis de voluntariado
La federación aborda un nuevo año con la satisfacción de la constitución, días antes de que finalizara 2012, de una nueva junta directiva al frente de la Asociación de Vecinos ‘La Parrilla’, de San Lorenzo
Juan Bautista Mullor, presidente de la Federación provincial de Asociaciones de Vecinos, reitera que “en general llevamos ya varios años pasando una crisis de voluntariado, no se encuentran personas dispuestas a continuar la labor de los que llevamos tiempo al frente de las asociaciones para hacer posible una alternancia necesaria y cada vez que se convoca una asamblea para renovar las juntas directivas de las asociaciones surgen complicaciones”.
Últimamente se ha producido la renovación de la directiva de la asociación del barrio de San Lorenzo que, como bien recuerda Mullor, fue una de las cinco fundadoras de la federación y es una de las más antiguas de la ciudad. “Tenía confianza en que hubiera gente dispuesta porque de lo contrario se hubiera producido una situación comprometida”, añade, al tiempo que entre las causas que motivan esa falta de implicación se encuentra “que hacemos una labor altruista, sin ánimo de lucro, y requiere de una dedicación de tiempo que no está al alcance de todo el mundo”.
