Los ritos religiosos y la proximidad con el Mediterráneo marcan de forma decisiva las influencias de la cocina sefardí, cuya riqueza de sabores reune las influencias de la gastronomía árabe y la sobriedad de la cocina castellana.
De esta forma definió ayer las características más singulares de la herencia gastronómica de Sefarad el cocinero Víctor G.Gogler, del restaurante «Chloeys» de Tel Aviv (Israel) que dirigió ayer en la sede de la Fundación Cándido un taller de cocina organizado por la Empresa Municipal de Turismo de Segovia y la Red de Juderías de España, destinado a los profesionales de la gastronomía, en el que participaron cerca de una veintena de personas.
Gogler aseguró que la gastronomía sefardí «es una simbiosis de la forma tradicional de cocinar de los judíos que residieron en España con la del resto de comunidades judías expandidas por el mundo».
En este sentido, manifestó que en la cocina «no se puede hablar de diferencias sino de influencias, y la cocina sefardí viene influenciada por los ritos religiosos que marcan lo que se puede y no se puede comer, así como por el uso de tempuras en las verduras y los asados de carne, que es lo que más caracteriza esta gastronomía».
Gogler, nacido en Argentina pero residente desde hace varios años en Israel donde regenta uno de los restaurantes más conocidos de la capital hebrea, ha asegurado que el público «se sorprende mucho por los colores de los productos, propios de la cocina mediterranea y los aromas, lo cual no es una sorpresa, porque les hace recordar el acerbo cultural mediterráneo del que proceden».
Esta actividad se enmarca en las que la Red de Juderías está realizando en el ámbito del proyecto RASGO, que es una guía de funcionamiento común a todas las ciudades integrantes de la Red y en el desarrollo de actividades turísticas en cada una de las juderías
