Un nuevo terremoto de 6,3 de magnitud en la escala Richter sacudió ayer Ecuador, después de que un temblor de 7,8 registrado el sábado dejara más de 500 muertos en el país, informó el Instituto Geofísico de Ecuador.
Previamente, el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó de un temblor de 6,1 mientras con epicentro a 25 kilómetros al oeste de Muisne, en la provincia de Esmeraldas, una de las más afectadas por el temblor del sábado. El Centro de Advertencia de Tsunamis del Pacífico también registró el nuevo seísmo, situando su magnitud en 6,3, según Reuters.
Según los datos ofrecidos por el Instituto Geofísico, la potente réplica se ha producido cerca de la costa de Ecuador a una profundidad de 4,77 kilómetros. El órgano oficial ha informado en la última hora de más de una docena de réplicas más, de entre 3,6 la más reciente y 5 la siguiente al temblor de 6,3.
Por el momento no hay información sobre si este nuevo terremoto provocó daños adicionales o víctimas a los ya registrados tras el seísmo inicial. El último balance oficial hay ya 525 muertos y más de 4.000 heridos.
Ecuador ha registrado más de 500 réplicas desde el terremoto de 7,8 de magnitud en la escala Richter que sacudió la costa norte. Según la jefa de Sismología del Instituto Geofísico de Ecuador, Alexandra Alvarado, desde el sábado se registraron más de 500 réplicas lo cual “se esperaba” tras el fuerte temblor, el peor en décadas.
En declaraciones a la agencia oficial Andes, Alvarado indicó que “todavía hay posibilidad de que sigan ocurriendo” nuevas réplicas, de hecho hace unas horas se produjo una de 6,3 de magnitud, pero ha descartado que se pueda repetir un evento tan intenso como el del sábado. “Tan fuerte como el sábado, no, porque ese es el sismo principal y las réplicas siempre son menores en magnitud”, explicó, descartando los rumores que han circulado en las redes sociales en el país de que existe una amenaza de un seísmo devastador porque habría quedado una placa tectónica en el aire.
“Eso es falso porque las placas siempre están juntas, todo el tiempo, nunca se quedan colgadas, eso es un error”, indicó, recomendando a los ciudadanos que confíen en la información técnica proporcionada por el Instituto Geofísico.
Entretanto, un equipo de la universidad Yasay Tech se desplazó a la zona devastada por el terremoto para evaluar los daños y llegó a la conclusión de que la reconstrucción tardará años. El equipo ha visitado Pedernales, Manta y Portoviejo, tres de las localidades más afectadas. “La reconstrucción será larga. Tardará meses o años”.
