A la Gimnástica Segoviana le ha cambiado la cara en las tres últimas semanas, después de sumar siete puntos de nueve posibles con dos victorias conseguidas en los minutos de prolongación de los encuentros ante el Andorra y la Cultural Leonesa.
No cabe duda que el triunfo logrado hace tres fines de semana en La Albuera frente al Andorra, forjado gracias a los goles de Astray y Tellechea cuando el partido ya expiraba, fue el punto de inflexión que cambió la tendencia (hasta entonces a la baja) de una Segoviana que no encontraba la manera de invertir la tendencia que le estaba llevando a perder puestos en la clasificación, y que a pesar de haber sumado cuatro puntos en dos jornadas, comenzó su partido ante la Cultural Leonesa en posiciones de descenso.
Como bien señalaba Ramsés al finalizar el encuentro en León, las sensaciones que ofrecía el equipo gimnástico eran buenas, pero había que refrendarlas en puntos. Y el partido que la Segoviana jugó en el campo del líder del Grupo 1, un equipo que se pasó varios meses sin perder un solo encuentro, sirvió para refrendar no sólo las buenas sensaciones, sino también la idea de juego que el propio técnico señala que “es la que demandan mis jugadores”.
Sergi Molina, Abel Pascual, Astray, Tellechea y Davo ponen nombre a las cuatro remontadas del conjunto gimnástico
Porque los partidos se pueden jugar de muchas maneras, y en el Reino de León se puede ganar como hizo el Sestao, haciendo un ejercicio defensivo y aprovechando el contragolpe, o hacerlo como lo hizo la Segoviana, con un planteamiento ambicioso y ofensivo (que no es lo mismo que suicida) que en ocasiones puede salir mal como sucedió en Balaídos ante el Celta B, pero que otras veces sale bien, como pasó el domingo. Más allá de los goles de Astray y Fer Llorente, que indudablemente no se ven todos los días, el 2-3 no sólo premió los tantos de bella factura, sino también un planteamiento que provoca un gran desgaste físico y expone al equipo a correr unos riesgos defensivos que no todos los entrenadores están dispuestos a asumir.
Precisamente el apartado físico es uno de los detalles en los que más está destacando un plantel que tiene unos números ofensivos de equipo que aspira al play off de ascenso, y unos números defensivos de descenso a Segunda RFEF. Pero que la Segoviana haya marcado tres goles en los períodos de prolongación de sus últimos partidos señala que el conjunto gimnástico tiene una mentalidad ofensiva, pero también que tiene la capacidad física para aguantar los casi cien minutos que duran los partidos, y este hecho está siendo decisivo porque no todos los conjuntos de la Primera RFEF pueden decir lo mismo.
CINCO GOLES, OCHO PUNTOS
Porque no es lo mismo lanzarse al ataque y marcar un gol en un descuento, que hacerlo en uno de cada cuatro partidos que la Segoviana ha jugado en la presente campaña en la Primera RFEF. Sergi Molina ante la Ponferradina, Abel Pascual en Tarazona, Astray y Tellechea frente al Andorra, y Davo en el Reino de León han logrado que el equipo azulgrana haya sumado 8 de los 22 puntos que atesora en la clasificación.
Como siempre, todo tiene una doble lectura, y si la Segoviana ha marcado tanto en los descuentos ha sido porque necesitaba hacerlo ya que iba perdiendo sus partidos. Pero es indudable la capacidad de resistencia de un conjunto gimnástico que ya ha demostrado que es especialista en los tiempos de descuento.
SILVA Y LÓPEZ, CON EL EQUIPO FEMENINO
La marcha de Goiko Llorente del banquillo de la Gimnástica Segoviana que milita en la Liga Gonalpi femenina había dejado al equipo azulgrana huérfano de un entrenador, en una situación temporal que el club solucionó con la llegada de dos jugadores del primer equipo masculino, Juan Silva y David López, a la dirección deportiva del plantel femenino.
Silva destacaba del equipo su gran predisposición para el trabajo, “y eso es algo que te reconecta con lo que es la pasión por jugar al fútbol”, con jugadoras que llegan a cambian turnos en el trabajo por poder asistir a los entrenamientos, “y que hacen todos los esfuerzos posibles por no fallar ni un día”. El futbolista de la Segoviana intenta inculcar a las jugadoras la ambición defensiva en lo referente a la presión adelantada, “porque el fútbol femenino en estas categorías no está en absoluto exento de errores, y queremos que nuestras jugadoras aprovechen esos errores del contrario en lugares más cercanos a la portería”.
El conjunto gimnástico se ha adaptado a la categoría, y tras unas semanas de descanso mira a lo que resta de primera vuelta y toda la segunda con el aliciente de poder acabar la liga entre los seis primeros clasificados, lo que le propiciaría un nuevo ascenso, el tercero en tres temporadas, puesto que se está barajando una remodelación en el fútbol femenino autonómico, creando una Tercera División en la que, de lograr el ascenso, se ubicaría la Gimnástica Segoviana en la campaña 25/26.
