El Viveros Herol Nava perdió en casa frente al Rebi Cuenca en el encuentro que (salvando el lógico frente al Barcelona) más inferior se ha mostrado ante su oponente no sólo en la presente temporada, sino desde el retorno del equipo segoviano a la Liga Asobal. El equipo de Álvaro Senovilla se vio absolutamente impotente para superar la defensa de un conjunto conquense que pese a situarse con una desventaja de cinco goles en los albores del encuentro, dio la sensación de tenerlo todo bajo control gracias a su trabajo defensivo, más la aportación de su portero Pedro Tonicher.
Los dos conjuntos apostaron por correr en unos primeros minutos en los que el Balonmano Nava aprovechó unos momentos de precipitación ofensiva de su oponente para endosarle en apenas cuatro minutos un parcial de 5-0 que colocó el 10-5 en el electrónico y obligó a Lidio Jiménez a pedir tiempo muerto.
Acertó el técnico visitante adelantando las rotaciones, y la presencia de Tchitombi en la dirección puso la pausa en la ofensiva del Rebi, que en defensa elevó sus prestaciones hasta hacerse prácticamente impenetrable.
EL POZO SE SECA
Tanto fue así que el equipo local, que en los primeros diez minutos había logrado diez goles, en los diez siguientes apenas logró marcar uno, sin ideas para superar el 6:0 visitante que metía mucha profundidad en los laterales, y que incluso en sus minutos en inferioridad se mostró mejor que el equipo de casa.

La renta del Balonmano Nava se fue haciendo cada vez más exigua, hasta que a siete minutos para el descanso el Rebi ya había logrado empatar el partido (12-12) y disponía de un ataque para culminar la remontada. La aportación de la segunda línea no mejoraba al equipo, que pasó por momentos muy grises en ataque, incapaces sus jugadores de poder superar a una defensa muy expeditiva que ayudaba en gran medida a que el portero Tonicher pudiera elevar su porcentaje de paradas.
Pero con Gedeón Guardiola y Nico Bonanno en el centro la defensa del Viveros Herol también se mostró muy rocosa, y Luis de Vega también puso mucho de su parte para que el Rebi no lograra ponerse por delante. Así, en una recta final en la que (por fin) el Balonmano Nava logró aprovechar una superioridad numérica, con la ayuda de Pancho Ahumada culminando las contras, más la aportación de Dani Pérez en los siete metros, el equipo local consiguió de nuevo poner ventaja en el marcador, llegándose al descanso con 15-12.

Lo que sucedió en la segunda parte tuvo que ver con la lógica de los acontecimientos que habían sucedido en la primera, en la que el Viveros Herol había logrado respirar gracias al oxígeno que algunas precipitaciones del Rebi en ataque le concedían. Pero en cuanto el equipo de Lidio Jiménez serenó sus ánimos y entendió que bastaba con desesperar al Nava en su ataque para que poco a poco los de casa se fueran descomponiendo, fue no sólo una roca en defensa, sino también un martillo en ataque.
DESCOMPOSICIÓN
Así, el 6:0 visitante llegó a la categoría de muro impenetrable, secando de manera extraordinaria la producción ofensiva de los lanzadores segovianos, que una y otra vez se encontraban con Tonicher en los lanzamientos porque el guardameta leía perfectamente el lado hacia el que debía lanzarse ya que sus compañeros tapaban de manera más que efectiva el otro.
Al conjunto de Lidio Jiménez, le costó ponerse por delante en el electrónico, pero que en cuanto lo consiguió tras el empate a 18 goles, rápidamente tomó cinco tantos de ventaja que supo administrar con un rival que apenas podía aferrarse a algo para sobrevivir.

El Balonmano Nava lo intentó todo, pero el 6:0 conquense, más la aportación de Tonicher en la portería, impidió cualquier acercamiento en el electrónico. La dirección de juego de Tchitombi, la veteranía de Fede Pizarro y la aportación de los extremos finalizando los ataques al borde del pasivo hicieron el resto. Los de casa maquillaron el marcador con Nevado e Isaías Guardiola mejorando sus números, pero dejando la sensación de que, por primera vez en mucho tiempo (Barça aparte) no estuvieron a la altura de su rival jugando en casa.
