El concejales del grupo de Vox en el Ayuntamiento de Segovia pidieron este lunes al Gobierno municipal, a través de una moción, revisar el proyecto ‘Espacios de oportunidad: Acueductos de biodiversidad’ en el barrio de Nueva Segovia. Una propuesta llevada al Pleno que fue rechazada por los grupos del Partido Popular, PSOE, Izquierda Unida y Segovia en Marcha -Ciudadanos se abstuvo-; y que queda, según pidieron los portavoces y según aseguraron desde el equipo de Gobierno, sujeta a participación ciudadana.
Durante su intervención la portavoz de Vox, Esther Núñez, defendió el espacio para el estacionamiento de vehículos que Nueva Segovia actualmente dispone en las plazas de Tirso de Molina, Fernando Rojas, Calderón de la Barca y Bécquer, y aseguró que «se van a ver afectadas» al reducir «al 50% los aparcamientos», que actualmente se cifran en 746 plazas. Núñez señaló, «según la memoria técnica», que «la plaza Bécquer pasará de 258 a 129; Tirso de Molina, de 186 a 93; Fernando Rojas, de 210 a 105; y Calderón de la Barca, de 92 a 46». Asimismo, apuntó que esta reducción «repercutirá negativamente a la movilidad urbana y a la viabilidad de comercios y establecimientos hosteleros».
Estos datos ofrecidos por Vox fueron rechazados por parte del resto de grupos municipales, ya que en la memoria técnica no hay, por lo menos hasta el momento, ninguna cifra relativa a la reducción de plazas de aparcamamiento. Guillermo San Juan (Segovia en Marcha) cuestionó que «de dónde sacan esos datos» y Ángel Galindo (Izquierda Unida) calificó la propuesta de Vox como «interesada» al generar una «alarma social». Miguel Merino (PSOE), por su parte, defendió «los cambios» que pueden haber en el proyecto, abierto a la «partipación ciudadana»; y Noemí Otero (Ciudadanos) abogó por «la escucha activa».
En ese sentido, el concejal de Barrios, Sostenibilidad Ambiental y Salud Pública, Gabriel Cobos, aseguró que desde el Gobierno municipal tienen previsto reunirse con los vecinos y comerciantes «no solo de de Nueva Segovia; sino de toda la ciudad»; además de los grupos políticos.
El proyecto de renaturalización de la ciudad se puso en marcha con el anterior equipo de Gobierno (PSOE e IU) y cuenta con una subvención de 3,8 millones de euros a ejecutar hasta 2025, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, de fondos europeos ‘Next-Generation’.
