Un último cuarto absolutamente efervescente le dio la victoria a El Cochinillo Segoviano en su partido ante el Cañadío Santander, que durante tres cuartos se mostró mejor que el equipo rosa, pero que en los momentos importantes del partido se vio superado por la defensa en zona que impuso Sergio García-Muñoz, y por un ataque muy acertado cuando había que estarlo.
Sobre la cancha del Emperador Teodosio se midieron dos estilos de juego similares, con fuertes defensas y acciones ofensivas muy verticales aprovechando la calidad en el uno para uno. Así que durante no pocos minutos de partido la igualdad fue la nota dominante, con El Cochinillo intentando apretar a su oponente desde el saque de fondo, pero sin conseguir el objetivo de despegarse del marcador, porque el Cañadío aprovechaba muy bien las acciones individuales de sus jugadoras no sólo para mantenerse en el marcador, sino para liderar el mismo al final de los dos primeros cuartos.
Pero se le pusieron las cosas al equipo de casa en un tercer período en el que el conjunto cántabro llegó a situarse con siete puntos de ventaja (43-50) que no auguraban un final de partido sencillo para las segovianas.
Sin embargo, un cambio de defensa fue el detonante de la reacción de El Cochinillo, porque la zona 3-2 se adaptó muy bien al ataque del Cañadío que se atascó muchísimo, y en el aro contrario varios triples consecutivos relanzaron a las locales, que pusieron un parcial de 17-2 que rompieron el encuentro a su favor y consiguieron lo que casi nadie esperaba, que los últimos compases del encuentro fueran de celebración por una brillante victoria.
