La consejera de Industria, Comercio y Empleo de Castilla y León, Leticia García, anunció durante su comparecencia ante las Cortes, el lanzamiento de la Estrategia de Comercio Minorista y Rural. En su intervención, explicó de manera detallada el contenido de su programa de acción, subrayando la relevancia de la iniciativa para dinamizar y adaptar el comercio regional a los cambios en el sector y a las nuevas tendencias y hábitos de consumo. García destacó que esta estrategia incluye la aprobación de un nuevo marco regulatorio que será clave para ajustar la normativa vigente a las realidades actuales del comercio, así como para hacer frente a los desafíos derivados de la digitalización y los cambios en las preferencias de los consumidores.
En relación con las actuaciones previstas, la consejera mencionó que las medidas se estructuran en torno a seis líneas principales de trabajo. En primer lugar, se implementará la protección del comercio minorista, un sector que enfrenta una competencia creciente tanto de grandes superficies como del comercio en línea. En segundo lugar, se pondrá en marcha un plan para fomentar la formación y la cultura comercial entre los profesionales del sector, con el objetivo de proporcionarles las herramientas necesarias para adaptarse a las nuevas dinámicas comerciales. La tercera línea de trabajo incluye un firme apoyo a la modernización, digitalización e innovación del comercio, áreas que son cruciales para asegurar la competitividad de los negocios, en especial los más pequeños y tradicionales, frente a los gigantes del comercio electrónico.
La cuarta línea de acción se centrará en estimular la demanda en el comercio de proximidad, una medida que tiene como objetivo fortalecer el tejido comercial de los barrios y zonas rurales, y fomentar el consumo local. En quinto lugar, se buscará impulsar el emprendimiento dentro del sector, facilitando la creación de nuevos negocios a través de incentivos, formación especializada y apoyo financiero, para revitalizar el sector comercial, especialmente en las áreas menos desarrolladas o más afectadas por la despoblación. Finalmente, como sexto eje, se pondrá en marcha un plan específico de apoyo al comercio rural, una iniciativa clave para garantizar que los pequeños comercios en las áreas más despobladas puedan sobrevivir y seguir ofreciendo servicios a sus comunidades.
Reactivación del consumo
De forma complementaria a estas líneas estratégicas, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo seguirá desarrollando políticas para revitalizar la actividad comercial, destinando ayudas principalmente a la adaptación del sector a los procesos de digitalización y la modernización de las instalaciones comerciales. Estas ayudas no solo buscarán impulsar la digitalización, sino también facilitar la reactivación del consumo, un aspecto fundamental en un contexto económico en el que los hábitos de compra han cambiado drásticamente. Asimismo, se desarrollarán campañas de promoción y sensibilización para apoyar al comercio local y mejorar la competitividad del sector en su conjunto, fomentando una mayor implicación de los consumidores en las actividades comerciales de sus propias comunidades.
En lo que respecta a la ordenación y regulación del sector, García adelantó que se está tramitando la modificación del decreto que desarrolla parcialmente la Ley de Comercio de Castilla y León. Este cambio tiene como objetivo actualizar el marco regulatorio para incluir y dar cabida a las nuevas realidades del sector comercial. Entre los principales cambios que se introducirán en esta normativa, se encuentra la creación de nuevas categorías de establecimientos comerciales que tendrán un régimen especial de horarios, con el fin de ajustarse a las demandas de los consumidores y a las necesidades operativas de los comercios. También se abordará la regulación más precisa de nuevas actividades y fórmulas de comercialización, como las ventas ‘outlet’, las ventas de productos de segunda mano y otros modelos comerciales emergentes, que han ganado popularidad en los últimos años.
Salud laboral
Por otro lado, durante su intervención, Leticia García también subrayó el compromiso de la Junta de Castilla y León con el fortalecimiento de las políticas de prevención de riesgos laborales. La consejera destacó que se implementarán medidas de sensibilización y control que pondrán especial énfasis en aquellos aspectos relacionados con la salud laboral y la igualdad en el entorno de trabajo. La seguridad en el trabajo y la promoción de la igualdad de oportunidades son áreas clave para garantizar condiciones laborales justas y seguras, que beneficien tanto a trabajadores como a empleadores.
García destacó que todas las medidas serán objeto de negociación, consenso y coordinación en el seno del Diálogo Social, una herramienta que seguirá siendo fundamental para garantizar una interlocución fluida con los agentes económicos y sociales más representativos. En este sentido, subrayó que el Diálogo Social “continuará siendo el máximo órgano de interlocución”, ya que permite un trabajo conjunto entre la Junta, los sindicatos y los empresarios, lo cual es esencial para el desarrollo de políticas económicas y sociales efectivas. Además, la consejera insistió en que este foro es una herramienta útil para la acción política y para mantener la paz social, contribuyendo de manera significativa a la mejora del diseño y ejecución de las políticas públicas en la comunidad.
El Diálogo Social ha sido una pieza clave en la gestión de las relaciones laborales en la región, y la consejera subrayó la necesidad de seguir fortaleciendo esta vía de comunicación y concertación entre las diferentes partes implicadas. El trabajo coordinado entre los agentes económicos y sociales permitirá que las políticas que se implementen sean más eficaces y respondan de manera adecuada a las necesidades reales de los trabajadores y empleadores de Castilla y León.
La Estrategia de Comercio Minorista y Rural y el nuevo marco regulatorio que se aprobará, junto con las medidas para mejorar la salud laboral y fortalecer la prevención de riesgos laborales, reflejan un enfoque integral y coordinado para enfrentar los retos actuales del comercio y del empleo en la región.
