El Adelantado de Segovia
lunes, 1 diciembre 2025
  • Segovia
  • Provincia de Segovia
  • Deportes
  • Castilla y León
  • Suplementos
  • Sociedad
  • Actualidad
  • EN
El Adelantado de Segovia

Paredes engalanadas con joyas del Renacimiento

por Redacción
15 de septiembre de 2014
en Segovia
El arco de La Claustra de las Canonjías en la calle Velarde conserva restos del esgrafiado renacentista. / A.Benavente

El arco de La Claustra de las Canonjías en la calle Velarde conserva restos del esgrafiado renacentista. / A.Benavente

Compartir en FacebookCompartir en XCompartir en WhatsApp

La pausa en un mundo que sólo sabe correr

Iluminar un mundo de fantasía

Alan Parsons y Burning se suman al cartel de Músicos en la Naturaleza

Parte de los recursos turísticos y patrimoniales que hablan al ciudadano y al turista del pasado de Segovia se encuentra en el interior de patios y antiguas casas señoriales en forma de esgrafiado. No se trata, sin embargo, del esgrafiado mudéjar tan característico de las fachadas segovianas, realizado con cal, con tintes ocres o amarillos, y que reproduce motivos generalmente geométricos, si no, de murales realizados con una técnica distinta, con menos relieve y más figuras, que se popularizaron en el Renacimiento.

En las próximas semanas verán la luz las conclusiones de un estudio realizado por el historiador segoviano Rafael Ruiz Alonso, sobre ‘Aspectos del esgrafiado en el Renacimiento Español.

La investigación fue fruto de la colaboración entre el Instituto de la Cultura Tradicional ‘Manuel González Herrero’ y la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce, a raiz del acuerdo alcanzado en 2013 para apoyar el proyecto ‘Corrientes nacionales e internacionales del esgrafiado’. Un proyecto pionero en España que tendrá sus primeros frutos en el trabajo que ahora verá la luz y que será publicado por la revista especializada ‘Goya.

El contenido de este estudio aborda por vez primera la aplicación de una variante técnica del esgrafiado a la arquitectura española del siglo XVI, que llegó también a adornar los muros segovianos: el esgrafiado con acabado en cal.

Sus características más acusadas son el empleo de dos capas de diferentes colores —siendo su combinación más usual la que integra el gris y el blanco—, el poco relieve de su decoración y la aplicación de unos patrones ornamentales figurativos, más ambiciosos en detalles que el abstracto repertorio geométrico del esgrafiado mudéjar.

Origen italiano

Nacida en Italia en los albores del Cinquecento, esta técnica se expandió rápidamente por buena parte del continente europeo, cuajando especialmente en Suiza, Alemania, Austria, República Checa, Polonia, etc., encontrando también acogida en zonas muy determinadas del oeste peninsular, principalmente en dos núcleos de la provincia de León, el área segoviana, Extremadura y Andalucía occidental, a las que hay que sumar una parte muy importante de Portugal.

Cada uno de estos territorios irá aplicando a su arquitectura este procedimiento decorativo, plasmando con él elementos formales del léxico renacentista; sin embargo, parte de la ornamentación se desarrolló con pautas propias, de manera que casi puede hablarse de escuelas regionales.

Esgrafiado segoviano

Dentro de este panorama, Segovia se manifiesta con una personalidad propia al permitir observar cómo las nuevas modas se fueron aclimatando a los gustos de una ciudad acostumbrada al efecto del esgrafiado mudéjar, dando lugar a curiosos híbridos como la galería que se abre en el Palacio Ayala Berganza, donde comparten espacio la tradición y la vanguardia.

También debe obedecer a la pujanza de los gustos medievales segovianos el uso de elementos tapizantes, configurados ahora con el esgrafiado de raíz italiana, aplicados a zaguanes y patios de numerosos edificios, algunos ya desaparecidos como las Casas de Mexía Tovar, el del Conde de Bornos, los de los Cascales, el patio de ‘las Monas’, y el de Quintanar.

Hacia la mitad del siglo, la tendencia europea se impone —sin renunciar por ello a todas estas particularidades— ofreciendo manifestaciones tan importantes como la sacristía de la parroquia de Torreiglesias, el patio del Palacio del Marqués del Arco, el Arco de la Canonjía, el interior ruinoso de la iglesia de Santa María de Mediavilla en Pedraza o la galería que se abre al jardín en el Torreón de Lozoya.

Pérdidas significativas de este panorama son el campanario de la iglesia de Hontoria o una dependencia interna del monasterio de San Antonio el Real, donde apenas se conservan unos fragmentos.

En la península

El artículo del historiador segoviano ahonda en más manifestaciones de este tipo de esgrafiado en el resto de la Península. Entre ellas, destacan los murales del monasterio de Santa María de Carrizo, de Carrizo de la Ribera, y el convento de Nuestra Señora de la Concepción en Villafranca del Bierzo, que caracterizan al núcleo leonés por la aplicación de unos repertorios iconográficos altamente simbólico. Entre los motivos, caben las edificantes fábulas de Esopo y otros cuentos muy populares que tienen como protagonista al zorro Renart. Igualmente encontramos numerosos seres fantásticos que previenen al espectador contra los peligros de la imaginación desbordada. No menos importante es la representación de una vanitas en el convento berciano, tema que cuestiona la importancia que concede el hombre a los asuntos terrenales, siempre breves y transitorios.

El estudio de Ruiz Alonso sitúa Extremadura como la región donde más proliferó el esgrafiado en esta etapa, pudiendo encontrarse sus evidencias en fachadas, patios, chimeneas, murallas e interiores de templos, palacios, castillos, dependencias monásticas, etc.

Abunda en estas manifestaciones la heráldica, los elementos arquitectónicos, la representación de personajes de la antigüedad, los diseños vegetales más diversos e, incluso, se llegan a plasmar escenas narrativas y calvarios.

Según el historiador segoviano, una de las realizaciones más ambiciosas es la sacristía de la iglesia de Santo Domingo en Trujillo. Singularidad destacada es la aparición de temas que tienen que ver con el Nuevo Mundo —lógico en una tierra de grandes descubridores—, tales como diferentes aves, elementos botánicos e indígenas americanos tocados con penachos de plumas, que aparecen representados en el castillo de Belvís de Monroy, Palacio de la Conquista en Trujillo, iglesia de Toril, entre otros.

Por su parte, Andalucía destaca por la primacía concedida a la decoración epigráfica el interior de la iglesia de San Francisco en Ayamonte en Huelva, repleto de inscripciones latinas extraídas del Libro de Job, Números, Salmos, Eclesiastés y Proverbios, configurando una original arquitectura ‘narrativa’.

El estudio hace un llamamiento sobre la importancia de este patrimonio, prácticamente desconocido, cuya conservación implica mantener a los edificios con el aspecto original que un día idearon para él artistas y mecenas. Desde el Instituto confían en que a ello “contribuya la publicación de este estudio, que también dará a conocer, más allá del ámbito segoviano, la labor de apoyo a la investigación del Instituto de la Cultura”, según indicaron fuentes del organismo dependiente de la Diputación Provincial.

Compartir en Facebook122Compartir en X76Compartir en WhatsApp
El Adelantado de Segovia

Edición digital del periódico decano de la prensa de Segovia, fundado en 1901 por Rufino Cano de Rueda

  • Publicidad
  • Política de cookies
  • Política de privacidad
  • KIOSKOyMÁS
  • Guía de empresas

No Result
View All Result
  • Segovia
  • Provincia de Segovia
  • Deportes
  • Castilla y León
  • Suplementos
  • Sociedad
  • Actualidad
  • EN

Edición digital del periódico decano de la prensa de Segovia, fundado en 1901 por Rufino Cano de Rueda