El alcalde, Pedro Arahuetes, aseguró ayer que el Ayuntamiento no puede impedir la construcción del edificio situado en el número 25 de la calle de San Marcos porque, según dijo, se trata de una obra que está amparada por la “legalidad”; al tiempo que invitó a la asociación Amigos del Patrimonio a que “dirijan sus críticas al PP, que fue quien aprobó la normativa urbanística” que permite levantar el inmueble.
“Amigos del Patrimonio” denunció que el futuro inmueble afectará a la vista de la iglesia románica de San Marcos y la perspectiva del Alcázar desde la carretera de Arévalo, modificando las características de una zona “de gran interés paisajístico y arquitectónico”. Asimismo, la asociación indicó que la admisión de una alegación que presentó al Plan de las Áreas Históricas (PEAHIS) hubiera evitado “lo que ahora es imparable”.
Arahuetes explicó que en el año 2000, el Ayuntamiento, bajo gobierno de PP-CDS, aprobó el Plan Especial de San Lorenzo, Valle del Eresma y San Marcos; y que el gobierno municipal del PSOE que encabeza “lo único que nos hemos encontrado ha sido una licencia que tenemos que otorgar con arreglo a un Plan Especial que está aprobado”.
“Si yo dicto un decreto denegando la licencia de obra a ese edificio —continuó Arahuetes— cometería un delito (…) por mucha razón que tenga la asociación Amigos del Patrimonio, que no lo dudo, no voy a cometer una ilegalidad”. En opinión de Arahuetes, el colectivo “no puede denunciar una obra que es legal”. “Otra cosa —añadió— es que lo critiquen y a quien tienen que dirigir su malestar es al PP que en su momento aprobó la normativa urbanística (…) nosotros solo podemos cumplir una normativa aprobada en un pleno del Ayuntamiento de Segovia”
“Siento mucho que denuncien situaciones que son legales, otra cosa es que estemos de acuerdo o no con la legalidad, porque lo que están denunciando es la legalidad”, zanjó Arahuetes.
