El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, hizo ayer balance de los Sanfermines 2013, unas fiestas en las que 1,6 millones de personas participaron en los actos programados, con un 6 por ciento menos de denuncias y la disminución en un 13 por ciento del numero de corredores en los encierros.
Los únicos puntos negros que ensombrecieron un poco las fiestas fueron la ikurriña que se colgó frente a la fachada del Ayuntamiento en el momento del chupinazo, y el montón que se formó en el encierro del día 13 en el acceso a la plaza de toros. Sobre este último incidente, Maya recordó que durante años el sistema había funcionado, pero «ese día falló». «Tendremos que trabajar en el control de este tema desde ahora», recalcó el primer edil, para adelantar que ya en septiembre convocará la primera reunión de la mesa del encierro en la que se tratará de solucionar el tema para que no vuelva a ocurrir una cosa similar.
Acto seguido, el alcalde citó la ikurriña que se colgó frente a la fachada del Ayuntamiento en el momento del chupinazo. Este boicot al chupinazo con la colocación de una gran ikurriña frente a la fachada de la Casa Consistorial retrasó el lanzamiento del cohete casi 20 minutos, un hecho que Maya calificó de «despreciable» y «mezquino», pero que no hizo que las fiestas decayeran.
No obstante, el edil valoró la «gran participación» durante los Sanfermines, con «momentos extraordinarios», «buen clima» y más afluencia de personas durante los dos fines de semana. A su juicio, «sería muy positivo que nos quedáramos con la idea de que remando todos en la misma dirección somos una gran ciudad y somos capaces de organizar las mejores fiestas del mundo». El regidor valoró el trabajo de todas las personas que «han hecho posible que estas fiestas tengan una magia especial».
Por otro lado, ayer se conoció que el joven de Vitoria que resultó herido muy grave en el tapón de la plaza de toros que se convirtió en una ratonera en el encierro del día 13 continúa ingresado en la UCI del Complejo Hospitalario de Pamplona y evoluciona «favorablemente» dentro de la gravedad.
Según informó el Gobierno de Navarra en un comunicado, J.J.M.R., de 19 años de edad, continúa en la UCI con síndrome de asfixia y se encuentra en situación «estable».
Los otros dos heridos más graves evolucionan «favorablemente» dentro de la gravedad. Uno de ellos es R.T., de 28 años, de nacionalidad irlandesa, que resultó cogido en el montón del día 13, se encuentra en observación, en situación «estable».
Por su parte, la herida por asta de toro en el encierro del día 14, J.E., de 23 años, de Australia, evoluciona dentro de la gravedad.
En las últimas horas han dejado el hospital cuatro de los 14 corredores que estaban ingresados en el Complejo Hospitalario de Navarra. En concreto, los cuatro pacientes dados de alta son un corredor cogido en el encierro del día 12, X.I.D., de 32 años, de Pamplona, herido en la carrera del día 12 y que presentaba traumatismo leve; y tres paricipantes del encierro del día 14: J.B.G, de 25 años, de Barañáin, con traumatismo leve; H.W., de 39 años, de California, con traumatismo con carácter reservado; y A.A.O., de 21 años, de Huarte, también con traumatismo de carácter reservado.
