La localidad segoviana de Navares de las Cuevas, lugar en el que se encuentra el Bosque Cajaviva, fue el espacio elegido para que un grupo de voluntarios de todas las edades disfrutasen de una jornada de voluntariado ambiental englobada en el marco de este proyecto impulsado por Cajaviva Caja Rural.
La actividad, que supuso una jornada lúdica y educativa dirigida para los públicos de todas las edades, estuvo dividida en tres partes. Así, se llevó a cabo un paseo de interpretación ambiental, un taller para la realización de cajas nido para aves y el regado popular de los árboles que conforman el Bosque de Cajaviva y que sirvió para seguir con el compromiso ambiental adquirido en otoño con la creación de este espacio.
Bosque de Cajaviva
El pasado otoño, Cajaviva Caja Rural se embarcó en un proyecto para reducir, calcular y compensar sus emisiones de dióxido de carbono (CO2). De esta manera, se determinó que las emisiones de las oficinas de esta entidad en un año, ascendieron a un total de 232 toneladas de dióxido de carbono (equivalente), por lo que para su compensación era necesario la plantación de 2.552 árboles autóctonos, constituyendo este el origen y la motivación principal de la creación del Bosque de Cajaviva.
Por esta razón, gracias a la colaboración de la ‘Fundación Oxígeno’ y a la firma de un acuerdo de custodia del territorio con el Ayuntamiento segoviano de Navares de las Cuevas y con el Ayuntamiento de Caleruega (perteneciente a la provincia de Burgos), se procedió a la realización de la plantación de 2.552 árboles distribuidos en cuatro hectáreas de cesión municipal, completándose así el espacio del Bosque de Cajaviva.
Almendros, sabinas, encinas, quejigos, enebros, pinos piñoneros y espinos albar, conforman las plantaciones de este nuevo bosque que ayuda a absorber el dióxido de carbono de la atmósfera, a retener el agua y a evitar la erosión del suelo.
Igualmente, este espacio también se consolida como un refugio de la biodiversidad para diferentes conjuntos de especies de fauna y flora.
