Fotos: Miguel Ángel Fernández
La Biblioteca Pública ha tenido la buena idea de exponer una colección de programas de nuestras ferias desde el año 1893 al 1936. No alcanza mi archivo a tanto, porque el más antiguo que conservo es de 1904, al que se suman los de1922 y desde 1033 al 1936. Luego la colección sigue a partir de 1943 y creo que sin fallo hasta 2022, porque en los dos años siguientes no hubo ferias por culpa del mortífero Covid. Era muy chaval del 36 al 39, pero supongo que tampoco durante la desgraciada guerra civil, aunque unos días antes de estallar, sí se celebraron las Ferias y Fiestas, sin faltar corridas-novilladas. No publicaba entonces el Ayuntamiento en folleto el programa, por lo que editaron el que tengo los Sres. Alonso y Cabellos.
Aunque en algunos años –es imposible hacer estadísticas porque habría que invertir mucho tiempo en consultar uno por uno- pudo haber alguna novedad, aunque no demasiado importantes, los festejos y actividades se han celebrado en torno a una programación que ya viene, al menos de mis programas, desde el citado de 1904. Siempre ha habido cosas similares, como por ejemplo los conciertos de música, de los que la Bilaureada Banda de Música de la Academia de Artillería dio miles desde su creación, se supone que algo antes de 1870, hasta su lamentable desaparición definitiva en 1996. Aunque no haya datos concretos, como digo, se sabe que fue director de ella en 1872, el famoso compositor de zarzuelas Ruperto Chapí, que ganó la plaza por oposición. Datos que recoge en un pequeño libro el que fue su ultimo director, Héctor Guerrero Navarro, en un pequeño libro donde cuenta la historia de las bandas de música habidas en Segovia, contando, además de la de la Academia, la del Establecimiento Provincial (antiguo Hospicio) y la creada por Carlos Martín Crespo, La Popular, para concluir citando la fundada por él mismo, la Unión Musical Segoviana. También la Asamblea Provincial de Cruz Roja tuvo durante unos años banda de cornetas y tambores. Por eso no faltaban a diario, durante las ferias, las dianas, pasacalles, conciertos en la Plaza Mayor…Y puestos a no faltar, claro, las comparsas de gigantes y cabezudos, personajes que datan del siglo XV. Salió en los primeros desfiles La Tarasca, “personaje” cuyos restos no sé si se guardan en algún almacén municipal.
Estuvieron programadas, desde el origen, las corridas de toros y novilladas, con presencia de los diestros “del momento”, y tampoco los fuegos artificiales en los Altos de la Piedad, en el parque cercano al Cementerio, en el Paseo del Salón y en la misma Plaza Mayor.
Por supuesto que en ninguno de los programas han estado ausentes varias modalidades deportivas, así como bailes públicos y conciertos nocturnos hasta llegar a los que ahora se nos presentan “a bordo” de enormes camiones. Lo que se estilaba en los albores de las ferias eran las que se llamaban “kermesse”, es decir, fiesta a beneficio de alguna entidad asistencial.
A partir de 1943, el Ayuntamiento comenzó a editar el programa oficial-que encargó a unos particulares- en un atractivo folleto con primera página a todo color y asimismo algunas páginas interiores. Era alcalde Andrés Reguera Antón, y figuraron en estos programas, formato que siguió hasta 1950, ya con César Zubiaur Pons como alcalde, textos de Pío Baroja, Mariano Grau, Ramón Gómez de la Serna, Luis Felipe de Peñalosa, Francisco Rodríguez Guerrero, Francisco Martín y Gómez, Luis Martin Marcos…Y también en algunos se reproducían textos de una revista que se publicó algunos años durante las ferias bajo el título de “La Tarasca”, con datos de allá por los años 1801.
Programas significativos, además del de 1936, tenemos el de 1922 con ilustraciones de “Marcos” a todo color y en el que se incluían los actos de inauguración, en la plaza de Medina del Campo, de la estatua de Juan Bravo, obra de Aniceto Marinas, con asistencia del Rey Alfonso XIII.
Punto y aparte merece el recuerdo al que fue famoso ferial de ganados, que se celebraba en la llamada Dehesa, un amplio terreno que hoy ocupan el Cuartel de la Guardia Civil y un atractivo parque. Cerca de La Dehesa, junto a la ermita del Cristo del Mercado, existían unas pequeñas casas que generalmente estaban habitadas por ganaderos; hay testimonio de ello en fotografías de varios artistas.
Y por hoy, punto final, porque ya se ha presentado el programa de las nuevas y muy próximas ferias de este 2024.







