El Ayuntamiento de Segovia ha clausurado temporalmente el disco-bar Follow, establecimiento de hostelería de la céntrica calle de los bares (Infanta Isabel), por incumplir la normativa municipal de ruido, según se comprobó en una inspección municipal, confirmaron ayer fuentes del equipo de gobierno.
La clausura de este local se llevó a cabo el martes, 8 de septiembre, y el establecimiento podrá reabrir una vez se subsanen los problemas que se han detectado en la medición de ruidos del mismo, según sostuvieron las mismas fuentes.
El cierre del establecimiento, cuyas puertas presentan los correspondientes precintos con distintivo del Ayuntamiento, se ha producido tras la apertura de un expediente sancionador.
La inspección municipal, de oficio, descubrió niveles de ruido por encima de los permitidos en la correspondiente ordenanza pero otras fuentes han indicado que los responsables del establecimiento acumulan otras sanciones por infracciones. En uno de los casos la multa asciende a más de 5.000 euros, al tratarse de una sanción por infracción grave.
Fuente del equipo de gobierno municipal han señalado a EL ADELANTADO que se trata de la única clausura que se ha producido este año de un establecimiento de hostelería y posiblemente haya que remontarse a 2008 para encontrar un precedente de estas características, aunque en esa ocasión se debió a problemas de seguridad.
En este sentido, en ese año se procedió al cierre cautelar de la discoteca La Escuela, en el barrio de San Millán, porque varios informes municipales indicaron que incumplía distintos puntos de la normativa de seguridad, salubridad e higiene para este tipo de establecimientos dedicados al ocio nocturno.
En 2004 un decreto del entonces alcalde, Pedro Arahuetes, ordenó el precinto de los equipos reproductores de música de la discoteca Kyber, una de las más concurridas de la capital en ese momento, situada junto al Acueducto, tras acumular varias denuncias presentadas por vecinos de la zona debido a molestias de ruidos y a reiterados incumplimientos de las medidas correctoras ordenadas a tal efecto por el Ayuntamiento en los meses anteriores.
Desde el Ayuntamiento han querido recalcar, por otro lado, la colaboración de la Agrupación Industrial de Hosteleros Segovianos (AIHS), que conoce las medidas que se desarrollan para el cumplimiento de las ordenanzas por establecimientos del sector y, como no podía ser de otra forma, muestran conformidad con sancionar a los responsables, especialmente cuando se trata de infracciones reiteradas.
La Ordenanza municipal de Ruido y Vibraciones del Ayuntamiento de Segovia, de febrero de 2014 (publicada en Boletín Oficial de la Provincia el 31 de marzo de ese año), establece que las actividades que dispongan de instalaciones musicales deberán contar con un limitador-controlador de potencia acústica que cumpla determinadas características técnicas.
