El valle del Clamores y sus huertas fueron ayer escenario del homenaje que la Asociación Cultural Plaza Mayor quiso tributar ayer a todos los hortelanos en la persona de Mariano Núñez González, uno de los pocos horticultores que aún mantienen vivo el recuerdo de una época en la que la sociedad viviá pegada a la tierra.
Con el presidente de la asociación, Francisco del Caño como maestro de ceremonias, el acto comenzó con una evocación de los valles del Eresma y del Clamores a cargo de Pedro Emilio Espinar de Andrés, que en su intervención trazó una amplia semblanza de los paisajes y las personas que “han modelado la tierra de Segovia” durante siglos y que ayer fueron recordadas en este sencillo acto.
Posateriormente, el veterano “Lolete” fue el encargado de entregar la placa conmemorativa a su compañero homenajeado, que agradeció esta distinción y confesó ante los presentes que “aunque mi profesión fue la de profesor mercantil, mi oficio verdadero siempre fue el de la huerta”.
La asociación quiso también tener un recuerdo para el hortelano Gregorio Moreno, recientemente fallecido, a través de un ramo de flores que recogió emocionada su hija.