El CD La Granja necesitaba una victoria de categoría para salir de su crisis, y la consiguió en el campo de uno de los históricos de la Tercera División, un Real Ávila cuya irregularidad comienza a hacerse más que evidente en este tramo de la temporada.
El equipo de Javier Jadraque, de capa caída tras los últimos resultados adversos, había pasado una semana complicada, y saltó al campo consciente de que debía mejorar mucho sus prestaciones defensivas si quería lograr algo positivo del Adolfo Suárez. Frente a un oponente que no tenía excesiva mordiente sobre el campo, los granjeños se defendieron con orden, aunque sin atacar con demasiados jugadores la portería local, hasta que a punto de cumplirse la media hora de partido, un penalti transformado por Alex Rabadán hacía saltar por los aires el sistema defensivo de los visitantes, que acusaron el golpe.
Con tiempo para mejorar, sobre todo en el apartado ofensivo, el CD La Granja saltó al campo con otra mentalidad en la segunda parte, aunque no fue hasta superado el primer cuarto de hora de la reanudación cuando los de Jadraque comenzaron a sumar llegadas al área defendida por Darío, hasta que Guillermo puso de nuevo las tablas en el marcador al transformar el lanzamiento de un penalti con el que fue sancionado el equipo de casa.
Con el Real Ávila desactivado totalmente en ataque, abusando de los envíos en largo, fáciles de defender por la zaga segoviana, el CD La Granja se vio muy cómodo en el partido, jugando con mucha intensidad, tanta que los de casa se quejaron por ello en no pocas ocasiones. Pero para salir de un mal momento de juego se exige por lo menos actitud, y la que puso el equipo del Real Sitio fue difícilmente reprochable.
El partido, controlado de manera total por los visitantes, se encaminaba hacia el empate final, cuando Juanlu enganchó un buen remate a portería, Darío no fue capaz de blocar, y solo pudo despejar el lanzamiento, dejando el balón a los pies de Mario, que empujó el esférico a la red, haciendo el 1-2 y poniendo directamente los tres puntos en el autobús de un CD La Granja que sale del descenso con los tres puntos sumados del Adolfo Suárez, y de paso se regala una semana de tranquilidad para continuar trabajando.