El ilusionante proyecto con el que el CD Quintanar comenzó la temporada con su equipo femenino en la Liga Doble G saltó por los aires hace apenas un par de semanas, cuando el club decidió prescindir de los servicios del cuerpo técnico alegando falta de profesionalidad en la figura de su entrenador, Iván Benavides, que era la cabeza visible de un proyecto deportivo, en principio para tres años, que pretendía conseguir un ascenso en cada una de las tres temporadas.
El técnico palentino, evidentemente dolido por las declaraciones del presidente del club, Alberto Barrero, a Radio Segovia en las que se señalaba que había humillado a alguna de sus futbolistas, que no había cumplido con su trabajo al faltar a varios entrenamientos, o incluso que había elaborado una convocatoria abierta en la que podía ‘apuntarse’ cualquier jugadora, quiso salir al paso de las mismas, poniendo de manifiesto que “en ningún momento he humillado a una sola de las jugadoras. En 23 años de carrera nadie me había acusado de algo así, que jamás faltó a los entrenamientos sin un motivo justificado y que la lista ‘abierta’ de convocadas no fue más que un mensaje en el grupo del equipo pidiendo que las jugadoras señalaran si estaban disponibles para poder jugar ese fin de semana después de haber sufrido varias bajas en los entrenamientos por cuestiones tanto de salud como de estudios.
P. Evidentemente esto no se esperaba en el mes de agosto o septiembre, cuando empezaron el trabajo…
R. No, en ningún momento. Nosotros, al igual que un número de jugadoras, vinimos para participar en un proyecto ilusionante, y es lo que hasta el momento estábamos haciendo, porque los resultados acompañaban y el equipo estaba funcionando bien.
P. Entonces… ¿por qué se llega a esta situación?
R. Es algo que todavía no me explico. Estábamos trabajando, hacíamos nuestra labor, enseñando los conceptos que queríamos y trabajando por el club y por el equipo para conseguir los objetivos que se marcaron en su momento.
P. ¿En qué consistía el proyecto?
R. El proyecto me pareció ilusionante cuando me lo propusieron, y aunque tenía ofertas de Valladolid y del mismo Palencia, me atrajo el del Quintanar, que era muy ambicioso, porque se partía con una gente que aportaban patrocinadores y dinero para que se pudieran incorporar jugadoras y cuerpo técnico para hacer el trabajo que se estaba haciendo hasta ahora.
P. ¿Es decir, que el proyecto incluía un cuerpo técnico, y un grupo de jugadoras que llegaban específicamente a jugar?
R. Correcto, viajando desde otros lugares de la comunidad, o incluso desde Andalucía para entrenar y jugar. El proyecto era para tres años, intentando cada año un ascenso retocando siempre el equipo, para poner lo más alto posible al club.
“En ningún momento he humillado a una sola de las jugadoras. En 23 años de carrera nadie me había acusado de algo así”
P. Pero llega un momento en el que el presidente del Quintanar decide acabar con el plan.
R. El club toma una decisión, y el presidente hace unas declaraciones que en ningún momento son contrarrestadas. Se dicen cosas que faltan a la verdad. Yo sólo había faltado a un entrenamiento por un tema laboral, porque siempre hacía mis esfuerzos y pedía días en mi trabajo para venir a entrenar porque yo me involucro con mi cuerpo técnico y con mis jugadoras. Sin embargo, tengo una semana mala en la que mi hija y yo tenemos que ir al hospital por una gripe, y después tengo un problema en mi vivienda que me impide venir a entrenar. Está todo documentado.
P. Se señala incluso a una lista de convocadas en la que podía apuntarse quien quisiera…
R. También es algo que no es cierto. Habíamos sufrido dos semanas malísimas, con muchas ausencias por estudios, y por enfermedades, por lo que puse un mensaje en el grupo de jugadoras pidiendo que se apuntaras en una lista las que estuvieran disponibles. Quería ver la disponibilidad de las jugadoras, pero en ningún momento eso era una convocatoria. Se hizo así, no se hizo de otra manera. Por eso digo que ante la falta de la verdad, hay que demostrar siempre cómo se hacen las cosas.
P. ¿Hay contratos firmados de por medio?
R. Cierto. Aunque el club ha dado de baja ante la Federación el contrato de los cuerpos técnicos, ya sea el del delegado, los de los entrenadores… yo en ningún momento he firmado la rescisión de mi contrato. Ni yo ni ninguno de los integrantes del cuerpo técnico.
Preguntado sobre esta cuestión, el presidente del CD Quintanar rehusó hacer más declaraciones de las que ya ha realizado.
14 JUGADORAS APOYAN AL CUERPO TÉCNICO
No es sencillo ponerle fin a un proyecto de la noche a la mañana, y menos cuando hay contratos firmados de por medio. El proyecto del Quintanar para elevar al equipo femenino hasta la categoría nacional estaba más que atado por escrito, con la llegada de varios patrocinadores que iban a aportar el soporte económico para poder sostener el proyecto, y la inclusión en el equipo de algunas jugadoras procedentes de fuera de Segovia, algunas de ellas llegadas incluso desde Huelva, con el fin de poder elevar el nivel lo suficiente como para cumplir con el objetivo del primer año de competición, que no era otro que subir a la Liga Gonalpi, algo que hasta la derrota frente a la Segoviana se estaba cumpliendo de manera más que satisfactoria, con el conjunto amarillo contando todos sus partidos por victorias, la mayoría de ellas holgadas.
Mucho se ha especulado acerca de las ‘primas’ que cobraban las futbolistas, y desde el cuerpo técnico aclaran el asunto, señalando que lo que se abonaba era una cantidad de dinero por los minutos jugados en los partidos en los que se lograba la victoria como compensación por kilometraje, sin que las cantidades fueran en absoluto significativas.
Hasta catorce futbolistas de la plantilla apoyan al cuerpo técnico, por lo que no será sencillo que continúen jugando esta temporada en el CD Quintanar si no hay un vuelco a una situación que, de continuar la falta de acuerdo entre las partes, podría terminar incluso en los juzgados.
