Al igual que hiciera el pasado mes de abril, la titular del Juzgado número 5 de Valladolid rechazó ayer de nuevo el ingreso en prisión de Óscar S., el sospechoso de matar a Esther López, la joven de Traspinedo (Valladolid) desaparecida el 13 enero de 2022 y cuyo cadáver fue encontrado 23 días más tarde, aunque sí decretó su libertad bajo medidas cautelares como la retirada del pasaporte, la prohibición de salir de España y la obligación de personarse todos los lunes en el cuartel de la Guardia Civil más cercano a su domicilio.
En el auto dictado por la jueza Soledad Ortega, tras la declaración prestada por Óscar S. por espacio de una hora en sede judicial, también se establece para el sospechoso la obligación de comparecer cuantas veces sea llamado por el juzgado.
Se rechazó la prisión provisional, eludible con fianza de 20.000 euros, solicitada por la fiscal jefe de Valladolid, Soledad Martín-Nájera, que también participó en la declaración, argumentando que después de casi dos años de instrucción del caso no hay riesgo de fuga ni de que destruya pruebas. Por su parte, como en la anterior declaración del investigado, la acusación particular reclamó el ingreso en prisión.
La declaración Óscar S. se produce después de recibir el informe definitivo de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil que investiga el caso, y una vez que acordara el sobreseimiento provisional de la causa para los otros dos investigados por considerar que “no ha resultado debidamente acreditada su participación en la desaparición y posterior muerte violenta de la víctima”.
Óscar S. llegó los juzgados de la calle Angustias de Valladolid pasadas las 9 horas escoltado por agentes de la Policía Nacional y entró al edificio por la puerta principal para evitar ser increpado por el medio centenar de familiares y vecinos de Traspinedo que se agolpaban, en la calle Torrecilla, a las puertas del garaje de los juzgados.
Acusación
Tras conocerse la decisión de la jueza, que dentro de unos días también tendrá que pronunciarse sobre si se amplía el plazo de la investigación, el abogado de la familia de Esther, Guillermo Ruiz Blay, sostuvo que hay indicios suficientes para abrir juicio oral por la muerte de la joven por diversos delitos, entre los que citó, además del de homicidio, el de detención ilegal o contra la seguridad vial.
La Guardia Civil sostiene que aquel día, después de que un amigo de ambos dejara a Esther y a Óscar a bordo del mismo coche, discutieron y posiblemente él la agredió. Apoyándose en la localización de los teléfonos móviles o en las búsquedas en internet del sospechoso, el Instituto Armado sostiene que la atropelló en las inmediaciones de su casa sin que diera aviso al 112.
