Fue al final del pleno, tras cinco horas de debate y una treintena de puntos, cuando la Corporación aceptó la renuncia de Llorente, que hace año y medio sufrió un accidente cerebro-vascular del que está muy recobrado, aunque aún no se ha recobrado totalmente.
En una emocionada despedida el edil, que no pudo reprimir las lágrimas, tuvo sobre todo palabras de agradecimiento; agradecimiento para los que han sido sus compañeros en las distintas corporaciones de las que ha formado parte, para los funcionarios municipales con los que ha trabajado, para asociaciones de vecinos y otros colectivos ciudadanos, para los medios de comunicación… Además, pidió perdón a los segovianos por no haber «podido llevar hasta el final la misión que me encomendaron».
Con emoción le despidió también el alcalde de la ciudad, Pedro Arahuetes, que recibió de sus manos el primer bastón de mando, hace ya diez años; y palabras de afecto y cariño tuvieron asimismo los portavoces de Izquierda Unida, Luis Peñalosa; Partido Popular, Jesús Postigo; y Partido Socialista, Javier Giráldez.
