“Sánchez compra sus apoyos con el dinero de todos los españoles. Todos vamos a tener que pagar el despilfarro de unos independentistas endeudados hasta las cejas”. Así de contundente se mostró ayer el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, sobre el pacto conocido el jueves entre el PSOE y ERC para la investidura de Pedro Sánchez y, especialmente, en lo referido a la condonación de una parte de la deuda autonómica con el Estado.
El jefe del Ejecutivo autonómico anunció la convocatoria de un Consejo de Gobierno extraordinario para hoy, sábado día 4 de noviembre en el que se analizarán “cuestiones sangrantes que se están viviendo en los últimos días como la amnistía, el perdón de la deuda o los pactos de Sánchez” y se tomarán decisiones de cara al futuro.
Para Alfonso Fernández Mañueco, Pedro Sánchez “pone en peligro nuestra forma de vida, nuestra dignidad y nuestro respeto” y aseguró no querer entrar en una “guerra de cifras”, aunque dejó claro que el acuerdo rompe el marco de coordinación financiera entre las comunidades autónomas. “Esto se debe debatir en el seno del Consejo de Política Fiscal y financiera porque es el instrumento que nos permite a todos llegar a acuerdos y no entrar en juegos o negociaciones bilaterales”. El acuerdo, señaló, va a remarcar “aún más” las desigualdades entre los españoles. Mañueco lamentó que aunque “Castilla y León ha saneado las cuentas públicas de la Comunidad con mucho esfuerzo, ahora tenga que pagar lo que se gastaron en ese referéndum ilegal o en las embajadas de Cataluña en el extranjero”. Para Fernández Mañueco, la actitud de Pedro Sánchez “ha pasado de ser una compraventa de votos a una absoluta estafa y todo con el único objetivo de seguir en la Moncloa”. “No nos conoce si piensa que no haremos nada. Está en un error si piensa que nos quedaremos cruzados de brazos”.
“Imagínense que no pudiéramos pagar los recursos para atender a las mujeres víctima de la violencia machista, ni las ayudas a la vivienda, ni las ayudas a la Política Agraria Común o que tuviéramos que suspender las ayudas a los trabajadores y las empresas” insistió el presidente para explicar el alcance de la condonación de la deuda a la Generalitat catalana, cifrada en 15.000 millones lo que representa, dijo, el presupuesto de Castilla y León en un año y 1.200 millones más. Precisamente para evitar esa situación, Fernández Mañueco prometió liderar la respuesta de Castilla y León ante “tal abuso de poder”. Está pisoteando el esfuerzo de las personas, de las familias de los trabajadores y de los empresarios de Castilla y León”.
