La Unidad de Arqueología de IE University, interesada en las nuevas tecnologías combinadas con el método arqueológico, ha hecho uso de este recurso para descubrir nuevas evidencias de antiguas ocupaciones, así como aspectos desconocidos de otros asentamientos, pendientes de una investigación en profundidad.
En este sentido, Olivia Reyes, profesora de IE University de Segovia, acaba de finalizar la fase de campo de un proyecto de investigación con Andrés Pérez, profesor técnico del Departamento de Arqueología de la Universidad de Sheffield (Reino Unido), y con la colaboración del Ayuntamiento de Herrera de Pisuerga y el Instituto de Estudios Pisoraca.
Para ello, profesores y estudiantes de ambas universidades se han desplazado a Herrera de Pisuerga (Palencia), donde han establecido su sede, con el objetivo de contribuir en la caracterización del paisaje romano del Norte de la Provincia de Palencia, contrastando la efectividad de diferentes métodos de prospección geofísica sobre algunos yacimientos descubiertos con anterioridad, en el marco del proyecto ‘Arqueología y arquitectura civil y militar en el norte de Hispania’.
A lo largo de las dos últimas semanas, los trabajos han consistido en la combinación de tres tipos de técnicas de teledetección aplicadas a la lectura de la superficie del terreno; electro-resistencia, magnetometría y radar de penetración terrestre.
Mediante la aplicación de diferentes principios geofísicos (corriente eléctrica, magnetismo y pulsos electromagnéticos respectivamente) se obtienen diferentes datos, complementarios entre sí, que ofrecen una visión de los restos arqueológicos con extraordinaria precisión detectando de manera no invasiva las estructuras y depósitos enterrados. Así, los sensores de cada uno de los diferentes aparatos empleados -resistivímetro, gradiómetro y georradar- recogen las distintas anomalías del terreno.
Una primera aproximación a los datos obtenidos revela distintos resultados en los yacimientos revisados gracias a la combinación de estas tres técnicas, a la espera de su posterior procesado en el despacho. Tal labor permite obtener una imagen del subsuelo, con las plantas de los restos arqueológicos detectados.
