La Junta de Castilla y León desarrolló en su última programación 219 programas mixtos para formar a 2.194 trabajadores, tras una inversión de 36,4 millones de euros. Ese fue el balance que realizó el consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones en declaraciones ayer en Soria. Estos cursos, dirigidos a trabajadores en activo, suelen tener una duración media entre seis y nueve meses y las clausuras suelen coincidir con los meses de julio y agosto y con noviembre y diciembre.
El consejero recordó que el pasado viernes se cerró el plazo de solicitudes de estos proyectos. “Hemos recibido muchas. Todavía estamos empezando a realizar esa evaluación para cuanto antes podamos tenerla, ya comunicar los proyectos aprobados a todas las diputaciones, ayuntamientos, entidades sociales”, comentó Veganzones, quien explicó que el presupuesto inicial era algo más alto, de más de 38 millones de euros, pero confió en que “se colmen todas las solicitudes” y “llegar incluso, si es necesario, a poner más recursos”. “La formación es actualmente la política de empleo más importante de todas”, sentenció el consejero, quien matizó que esta política “es la mejor que existe en España en materia activa de empleo y formación, que es la verdadera formación dual, aquella en la que los trabajadores, a la vez que cobran un sueldo, están realizando una práctica profesional y se están formando para obtener un título”.
A su juicio, la tecnología “está avanzando a pasos agigantados”. “Si nosotros no ponemos formación encima de la mesa para que todos los trabajadores se puedan recualificar y tener esa capacidad de inserción laboral, no conseguiremos mejorar las tasas de paro”, sostuvo Veganzones.
Certificado de profesionalidad
Estos programas mixtos se ejecutan para trabajadores sin titulación, con lo que el certificado de profesionalidad que obtienen cuando terminan esta formación “les sirve para tener una cualificación profesional que les avala para su inserción y su transición al mercado laboral”. Veganzones puso en valor esta modalidad formativa mixta, ya que “tiene como fin la eliminación progresiva del desajuste que se observa en el sistema productivo” entre las necesidades de las empresas y la cualificación de las personas en edad de trabajar.
Además, manifestó la necesidad de “fomentar la participación de las empresas mediante acciones formativas de corta duración y con prácticas en el entorno productivo que posibiliten la contratación a más largo plazo”. De este modo, destacó la importancia de colaborar desde la Junta con entidades locales y sociales para hacer llegar las políticas de formación e inserción al medio rural. “Si no trabajáramos de forma conjunta con las administraciones, sería imposible llegar a todos los municipios teniendo en cuenta la gran extensión de nuestra Comunidad”, afirmó.
Esa estrategia, continuó, es la misma que se prioriza en los programas de Empleo Local y Social, el de Fomento de Empleo Autónomo, de Orientación, Formación e Inserción, así como otras estrategias que la consejería diseña “en otras direcciones generales como la de trabajo, seguridad, salud y bienestar y la Estrategia de Comercio Minorista”.
Incertidumbre económica
Veganzones alertó de la “incertidumbre” económica que se avecina en el “segundo ciclo del segundo semestre en materia de mercado laboral”, que “suele ser el menos favorable en materia de empleo”, y al que en esta ocasión se suman situaciones que “nos van a poner dificultades para que esta evolución del mercado laboral continúe siendo positiva”.
El consejero adelantó que esta semana se conocerán las cifras del IPC, de deuda y de déficit”, aunque ensalzó “los buenos momentos conocidos este mes de agosto tanto en producción industrial como en exportaciones, intereses e inflación”. “Esperamos que Castilla y León siga resistiendo en esta dinámica y que con las políticas de este gobierno de coalición seamos capaces de tener un tono positivo hasta final de año”, reflexionó.
Veganzones matizó las “incertidumbres” a las que hizo referencia y que se han avivado durante los últimos meses. “Vienen dadas desde fuera, no son internas, y son el alza de los precios, sobre todo los alimentarios, la inflación subyacente y toda la dinámica de los tipos de interés, que está haciendo mucha mella en la subida de las hipotecas y que se supone que van a subir más”, comentó el consejero, quien mencionó también el alza de los precios de la luz, de la energía, del gas y los combustibles, que “vuelven otra vez hacia arriba”. “Todo eso crea unas incertidumbres que nos hacen ser muy precavidos en cuanto a la evolución del semestre”, expuso.

El consejero de Industria, Comercio y Empleo confía en “llegar a acuerdos” con sindicatos y patronal a partir de septiembre
El consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, confió ayer en “llegar a acuerdos” con sindicatos y patronal a partir de septiembre en las cinco consejerías con actuaciones en materia de Diálogo Social, tal y como las tres partes se emplazaron en el último Consejo del Diálogo Social celebrado.
El titular de la Consejería, espera que este próximo mes “se realicen planteamientos de aquellos temas en los que se está trabajando” y se pongan sobre la mesa “nuevos temas en los que se propone trabajar”. La idea, prosiguió, es que en el primer trimestre de 2024 “se eleve al Consejo y se firmen los acuerdos en los que haya consenso”.
Sobre la relación que el propio Veganzones tiene con los agentes sociales, consideró que “no tiene por qué ser ni mejor ni peor de lo que ha sido hasta ahora”. Nosotros tenemos la voluntad de seguir hablando con los agentes económicos y sociales en las reuniones del Diálogo Social”, espetó.
El consejero añadió que la aportación anual de 400.000 euros de la Junta al Serla “debería ser suficiente” para pagar las nóminas de los trabajadores, que estimó en alrededor de 250.000 euros. El consejero respondió así, durante una visita a Soria, a los sindicatos, que denunciaron los retrasos en los pagos de las mensualidades de los empleados. “Es una institución privada, no pública. El Serla es un acuerdo entre sindicatos y patronal en el que la Administración solo financia. Y desde 2019 lo hace de motu propio, con carácter discrecional, ya que no existe ningún acuerdo de financiación de esa entidad”, justificó.
En este sentido, Veganzones recordó que la administración tiene su propio servicio de intermediación de meditación, arbitraje y conciliación (SMAC), que presta en todas las provincias de Castilla y León, excepto en Valladolid.
En todo caso, la Junta consideró “conveniente” que se financie alguna de las actividades que recoge el acuerdo para la mediación y conciliación laboral que firman sindicatos y patronal y apostó por “homogeneizar todos los servicios que se dan en la Comunidad”.
Igualmente, subrayó que el servicio de intermediación individual “se presta en todas las provincias, excepto en Valladolid, que no tiene por qué ser menos, y no tiene que estar condicionado a lo que los sindicatos y patronal deciden hacer o no hacer en Valladolid”. Por ello, confió en que esta provincia “siga la misma dinámica que el resto”.
En la misma comparecencia Veganzones anunció la reestructuración orgánica del Servicio Público de empleo, Ecyl, antes de fin de año, cuando “estén todos los pasos normativos ya definitivamente calculados”. El consejero recordó que la modernización del Ecyl, informada ya en sede parlamentaria, contará con la contratación de 177 técnicos para todas las provincias, tanto en la parte de formación como en las de orientación y administración general. “Esta reestructuración orgánica va a ser un hecho a partir del segundo semestre del año”, ratificó.
Igualmente, se refirió a las dimisiones producidas en el seno de la Consejería, según Veganzones, “a petición propia, en algún caso de algún técnico”. “Es lo habitual en todas las consejerías, no hay ninguna diferencia con esto. De hecho se cubren las peticiones de ceses por circunstancias personales, totalmente personales, y facilitamos la carrera profesional y respetamos esas circunstancias. Esas dimisiones las cubrimos enseguida”, declaró.
