Los diez tripulantes de los dos buques estadounidenses apresados este martes en aguas iraníes en el Golfo Pérsico fueron finalmente liberados ayer junto a sus embarcaciones, según anunció la Guardia Revolucionaria, citada por la agencia local Tasnim. En un comunicado, la Guardia Revolucionaria precisó que la liberación se produjo después de que Estados Unidos se haya disculpado y después de que la investigación técnica haya confirmado que la entrada en aguas territoriales iraníes “no fue intencionada”, recalcaron.
Asimismo, el Gobierno estadounidense se comprometió a evitar que este tipo de errores se repitan en el futuro, según el texto. Washington había explicado desde el principio que los dos barcos de la Marina habían entrado en aguas iraníes por un fallo mecánico. Los barcos fueron apresados a las 16:30 horas del martes cerca de la isla iraní de Farsi.
Según la Guardia Revolucionaria, los diez detenidos —nueve hombres y una mujer— recibieron un trato adecuado, estarían a salvo y fueron trasladados a un lugar adecuado, sin dar más detalles. Según la agencia Mehr, habrían sido liberados en aguas internacionales. La Marina estadounidense confirmó, asimismo, que los diez marinos “han vuelto a custodia de Estados Unidos, tras abandonar Irán”, sin que haya “indicios de que han resultado dañados durante su breve detención”, según un comunicado reciente.
“Los marinos partieron de la isla de Farsi a las 8:43 horas a bordo de los dos Barcos de Mando Ribereño (RCB, por sus siglas en inglés) que estaban operando cuando perdieron contacto con la Marina”, precisó la nota. Los tripulantes liberados ya han sido trasladados a tierra por aire mientras que otros marinos les han dado el relevo y continúan hacia Bahréin, a donde se dirigían cuando les apresaron.
