Me acaba de entregar Glenn Murray, como socio de la Asociación de Amigos de la Casa de la Moneda de Segovia que soy, el último y voluminoso libro que, auspiciado por dicha asociación, acaba de publicar. Es, como todos los que hasta ahora han visto la luz con su firma, un “homenaje” más a la Real Casa de Moned que, habrá que recordarlo, es hoy lo que es gracias, precisamente, a él. Porque la histórica fábrica, si no hubiera sido por su decidida intervención, quizá estuviera aún en ruinas.
“Boato y tecnología. Cincuentines, centenes y escudos de a ocho” es su nueva producción, derivada de las investigaciones y estudios que con carácter general en el mundo de la numismática, y en particular con referencia al Ingenio de nuestra ciudad. Porque toda la biografía estudiosa e investigadora de Glenn Murray ha estado dedicada a esta fábrica, y máxime desde que llegó a la ciudad, momento en que le conocí, en 1988.
“Glenn Murray es, desde luego, un romántico”, escribe Antonio Alessandrini en las páginas de presentación del libro. Y creo que encaja muy bien el calificativo porque Murray, a pesar de todos los avatares sufridos desde su llegada a la ciudad, de todo su constante e intenso trabajo sobre el Real Ingenio, de su responsabilidad de encabezar el Proyecto Euromint para el Ayuntamiento y de haber sido contratado por éste para redactar el Proyecto Director Museográfico para la rehabilitación de la Ceca, relevado del cargo después por cuestiones en las que no puedo entrar por ser muy personales, Glenn Murray siguió adelante con sus trabajos sobre el Ingenio, publicando libros –tiene ya un buen número de ellos- y cientos de artículos sobre sus investigaciones. Y disfruta, como si la ceca fuera hija suya (yo creo que como tal la considera), hablando de ella, conferenciando sobre ella y mostrándola a amigos y personalidades que la visitan. No creo que ignore “todo lo pasado”, pero ahí está su verdadero mérito, su sinceridad, y su continua entrega, que quizá sirvieran hoy para reconsiderar por la nueva corporación la posibilidad de reintegrarle a su primitiva responsabilidad.
Murray se nacionalizó español en 2001, consiguió el título de doctor en Historia por la Universidad de Valladolid, con la tesis sobre la ceca segoviana, y entre las numerosas distinciones recibidas en España y América, tiene un especial cariño al Gran Premio de Patrimonio Cultural de Europa Nostra 2009, en la categoría de Dedicación Individual, que le entregó la Reina Sofía en el palacio de El Pardo al año siguiente, como reconocimiento a su labor durante 20 años a favor del Real Ingenio de la Moneda de Segovia.
“Boato y tecnología” es un volumen de cerca de 350 páginas, con estudios, estadísticas, fechas ordenadas por épocas, en relación con la numismática y en concreto con la numismática segoviana. Un elevado número de muy ilustrativas fotografías, con abundancia de monedas y troqueles, completan la redacción producto, se ve enseguida, de unas investigaciones llevadas a cabo por el autor en un buen número de archivos españoles.
Murray siempre ha soñado con una gran biblioteca numismática en el Real Ingenio, al que dona sus publicaciones a medida que van apareciendo y para la que solicita y busca obras de especialistas españoles y extranjeros.
En la parte última del libro se incluyen una “Relación de fuentes generales para los cuadros de cantidades acuñadas”, una “Bibliografía comentada”, un “Listado de monedas”, un “Glosario”, una extensa relación de “Notas al texto”, fotografías de “El Real ingenio ayer y hoy” y como cierre, una breve nota sobre el autor.
En la portada el libro lleva un montaje fotográfico con el cincuentín, centenes y escudo de a ocho, las monedas más famosas del monetario español, sobre la portada monumental de la Casa de la Moneda de Segovia, reformada por Fernando VII en 1829. Y en la contraportada, fotografía del canto de un cincuentín de 1651.
