El Real Madrid salió derrotado ayer en su visita al Levante en el Ciudad de Valencia (1-0) en un partido que el conjunto madridista afrontó con 10 jugadores desde la recta final de la primera parte por expulsión del alemán Sami Khedira, y en el que no pudo con el orden de un buen rival que no desaprovechó su ocasión, y cuyo presupuesto tiene bastantes menos ceros que los de Concha Espina.
Aunque los ‘blancos’ empezaron fuerte el partido -pese a la ausencia de Cristiano- y dominaron a los ‘granotas’, el meta uruguayo Gustavo Munúa apenas pasó por situaciones de gran peligro, ni en los momentos de mayor superioridad ‘merengue’. Eso sí, a Benzema se le anuló un gol por fuera de juego. Igual ahora pide ‘Mou’ un ‘9’…
Mientras, Casillas también se aburría de lo lindo, pues los locales no se atrevían a montar un contragolpe. Sin embargo, a la media hora de juego, el Levante le perdió el exceso de respeto al Madrid, logró liberarse de la fuerte presión inicial de los visitantes y buscó más el campo contrario, aunque en los metros finales se encontró con la eficacia de Pepe y compañía.
A pesar de su superioridad, el Madrid vio cómo se le complicaba el partido a cinco minutos de llegar al descanso, en una jugada que se convirtió en clave para el desenlace del choque.
Fue una tangana entre ambos equipos que se saldó con un rosario de tarjetas, entre las que destacó la segunda amarilla para Khedira, por empujar a Ballesteros mientras éste recriminaba a Di María que permaneciese tumbado sobre el campo, lo que dejó al club de Chamartín con 10 y con toda la segunda parte por disputarse. No obstante, muchos recordaban que los de ‘Mou’ habían sido capaces de levantar encuentros con uno menos. Pero ayer no fue el día, y el Ciudad de Valencia se ha convertido, tras el empate del año pasado, en una plaza maldita.
Tras el giro que dio el partido con la expulsión de Khedira, Mourinho recurrió a Cristiano desde el inicio de la segunda parte, y retiró del campo a Benzema. Kaká, que sigue tan romo como siempre, se fue también a la ducha y entró Higuaín.
Pero los cambios no funcionaron lo más mínimo, y los valencianos fueron capaces de aprovechar su ventaja demostrando que la defensa del Real Madrid sigue siendo un coladero, máxime cuando ‘superfichajes’ -de 35 millones de euros- como Coentrao no tienen órdenes para defender, como el ‘chupón’ de Cristiano. La defensa visitante comenzó a sufrir y mucho, y parecía más cercano el 1-0 que el 0-1. Además, el centro del campo madridista, liderado por Xabi Alonso, no lograba poner orden. Necesita ‘pareja de baile’ ya.
Así, a los 67 minutos, en una de las llegadas levantinistas, quizá la más clara, Koné batía a Casillas desde dentro del área tras una buena jugada por la banda de Venta. Lo peor de todo es que el Madrid se quedó ‘electrocutado’.
