Medio centenar de personas se ha concentrado este fin de semana en la estación de Madrid-Chamartín, tras culminar seis de ellos en bicicleta los más de 185 kilómetros que separan, por vías secundarias, Aranda de Duero (Burgos) y la capital de España. Exigen la reapertura de la línea férrea 102, conocida como Directo Madrid-Aranda-Burgos, que lleva cerrada desde que en febrero de 2011 un derrumbe en el túnel de Somosierra dejó interrumpido el tráfico ferroviario por ella.
La concentración ha sido el punto final de la iniciativa popular impulsada por un aficionado arandino al ciclismo, Pablo de la Rubia, para reivindicar la reapertura de este trazado ferroviario y su puesta en valor, tanto para transporte de mercancías como traslado de pasajeros. “Siempre hemos sido una sociedad de progreso e intuimos que nos estamos quedado atrás. Para nosotros el tren es el enganche al futuro. No queremos que sea demasiado tarde y por eso le pedimos al Estado, al Gobierno, que defienda los intereses de una sociedad convencida de que nos merecemos que se nos devuelva el tren”, ha señalado De la Rubia durante la lectura de un manifiesto.
La comarca arandina, incluida dentro de la España despoblada, ha destacado por su pujanza económica, motivada por su riqueza industrial y vitivinícola, “que se está viendo condicionada de forma determinante y para mal por las pésimas comunicaciones”, ha añadido. “No pararemos hasta que nos devuelvan el tren y reactivemos esta línea Madrid-Aranda-Burgos. Estamos seguros de que lo conseguiremos y éste y todo el esfuerzo puesto, habrá valido la pena”, ha concluido.
A la concentración se han sumado representantes de los movimientos de la Sierra Norte de Madrid y de Segovia que también respaldan la reivindicación. En total, una treintena de ciclistas la que ha participado en esta marcha reivindicativa que ha partido de la capital ribereña, aunque solo seis han cubierto los 185 kilómetros del recorrido, con subida a los puertos de Canencia y Navafría.
