En la tercera jornada del juicio en la Audiencia de Sevilla, el fiscal encargado del caso, Luis Martín Robredo, ha finalizado su interrogatorio con una misma pregunta: «¿Dónde se encuentra el cuerpo de Marta?».
«No lo sé, señor fiscal», ha contestado Samuel Benítez, acusado de participar en la operación para sacar el cuerpo del piso; «Es algo que no he sabido nunca», ha dicho Francisco Javier Delgado, hermano del asesino confeso, Miguel Carcaño; y «No sé donde se encuentra», ha afirmado María García, la novia de Delgado.
Samuel Benítez ha negado lo declarado por Carcaño, que le implicó en el traslado del cadáver, ha dicho que «nunca» estuvo aquella noche en la vivienda de su amigo y ha manifestado que la Policía le presionó con implicar a su familia y a su novia, por lo que confesó.
Ha afirmado que todos los detalles «se los fue dando la Policía» y él «solo tenía que asentir».
Francisco Javier Delgado, hermano de Carcaño, ha explicado al tribunal que, tras la desaparición de Marta, preguntó hasta dos veces a su hermano si estaba implicado y éste «mantuvo la misma historia», por lo que cuando lo detuvieron el 13 de febrero de 2009 se sintió «totalmente engañado por él» al «haber querido protegerlo».
La novia de Delgado, María García, ha reiterado sus declaraciones anteriores que no oyó nada, ni siquiera a los amigos de Marta que estuvieron llamando a las persianas del piso, en busca de la desaparecida.
El juicio, en el que Carcaño se enfrenta a 52 años de cárcel por violación y asesinato y sus cómplices a penas de hasta ocho años, ha quedado aplazado hasta el próximo lunes, cuando empezarán a declarar los testigos.