La plataforma ‘Cega el río que nos une’, junto a otras asociaciones ambientalistas, ayuntamientos y personas ribereñas y de la Tierra de Pinares han presentado un recurso potestativo de reposición ante la decisión de la Junta de Castilla y León por la que se autoriza y declara la utilidad pública, el interés general y la urgente ejecución de las obras para la gestión hídrica del sector oriental del acuífero cuaternario y las obras de mejora del regadío en la zona norte de El Carracillo, instando la suspensión de dicho acuerdo y que no se lleven a cabo las obras de la tercera fase de la recarga del Carracillo.
El Acuerdo 15/2023 pretende expropiar a los vecinos de Gomezserracín en más de 900 parcelas de pinares una superficie e implantar en ellos las infraestructuras de esta obra excavadas en el terreno, una balsa semienterrada de regulación semanal, la estación de bombeo, kilómetros de tuberías y líneas eléctricas, arquetas, casetas para bombas, muy amplios caminos, hasta el suelo del cuaternario, para extraer el agua del pinar y llevarlo a la balsa de regulación que lo enviará a la demanda a las parcelas de riego de la Zona Norte del Carracillo.
La plataforma afirma que “la sustracción de mayor volumen de agua en el río Cega, aumentando además el período de derivación, dejará al río en un riachuelo, incapaz de recargar de manera natural su cuenca aguas abajo. Esta circunstancia amenaza las reservas de agua potable necesaria para el verano en el abastecimiento de la Mancomunidad de las Lomas, así como el regadío de las vegas de los pueblos ribereños aguas abajo”.
Otra amenaza importante llegará para el pinar de los vecinos de Gomezserracín, “que verán sus propiedades pisoteadas con unas infraestructuras hidráulicas para sacar el agua potable del subsuelo y llevárselo a regar las explotaciones de unas pocas macroempresas. La Junta de Castilla apuesta por un modelo de regadío intensivo, causante de la sobreexplotación y contaminación del acuífero y del uso continuo de plaguicidas”.
“La Junta de Castilla y León y la Confederación Hidrográfica del Duero llevan muchos años creando unas expectativas de agua ilimitada entre los regantes, que aumenta el consumo, cuando la realidad hídrica de cambio climático nos obliga a una disminución del mismo” finaliza el comunicado enviado a los medios.
