El Rey Don Juan Carlos y la Reina Doña Sofía expresaron ayer su apoyo, su cariño y su solidaridad a las familias de las víctimas mortales de la tragedia ferroviaria del pasado miércoles por la noche y a los heridos en el siniestro, durante una visita que realizaron a Santiago de Compostela.
«Todos los españoles se unen al dolor de los familiares», manifestó el Monarca al abandonar junto a la Reina el Hospital Clínico de la capital gallega, en el que está ingresada la mayoría de los heridos en la peor tragedia ferroviaria en cuatro décadas en España, que dejó 80 víctimas mortales.
«Estamos con todas las víctimas y con las familias y los amigos de las víctimas», dijo el Rey visiblemente emocionado y que vestía de riguroso luto. «Todos los españoles sienten el dolor de las familias y esperamos que los heridos se recuperen poco a poco», manifestó.
Doña Sofía había regresado horas antes a Madrid desde Mallorca, a donde había viajado el martes para pasar allí una temporada en las vacaciones estivales, para acompañar al Rey en el viaje a Santiago de Compostela.
El Monarca tuvo también palabras para todos los que participaron en el dispositivo que se inició tras el accidente, y especialmente para los ciudadanos que se volcaron en donar sangre de forma masiva al conocer el siniestro. «Gracias», les dijo Don Juan Carlos, destacando el espíritu de ciudadanía.
Tras su visita al centro sanitario, los Reyes se dirigieron a otro de los hospitales en los que se encuentraban el resto de los heridos del accidente.
Por la mañana, el Monarca había expresado ya su tristeza por lo sucedido en una carta que la Casa Real colgó en su página web.
«Me dirijo a los familiares y amigos de las víctimas mortales, a los heridos y a todos los damnificados por este desgraciado suceso que, como seres humanos y como españoles, nos conmueve y nos llena de dolor y tristeza», escribió el Rey, que expresó también su «profundo cariño y toda la cercanía y la solidaridad» de la Familia Real y de todo el país con las víctimas y sus seres queridos.
España «hoy tiene depositada toda su emoción en el corazón de la querida tierra gallega», indicó Don Juan carlos, destacando que el siniestro ocurrió la víspera de la celebración de la festividad del Apóstol Santiago, Día de Galicia.
También aseguró estar recibiendo «sentimientos de pesar» y condolencias de la comunidad internacional y de sus dirigentes por las consecuencias del descarrilamiento del tren.
