El deporte ayuda a superarse, respetarse y a mejorar el autocontrol. Facilita conciliar el sueño y que este sea de mejor calidad. El ejercicio físico desarrolla el espíritu colectivo y esta considerado un medio de sociabilización. La práctica de una actividad deportiva de aproximadamente una hora a razón de dos o tres días por semana, incrementa la esperanza de vida.
Las bondades del ejercicio físico, transcienden lo puramente físico, contribuye al bienestar psicológico, ayudando a canalizar la energía, y a desarrollar la confianza. Una buena actividad física nos ayuda a vivir más y mejor.
De encuestas realizadas últimamente se detecta que han ganado posiciones los deportes individuales. Ni que decir tiene que el ejercicio físico, debe ir acompañado de una alimentación sana. Una nutrición saludable no solo nos ayudara a sentirnos mejor, sino aprevenir enfermedades futuras. En los próximos años, los deportes que se practican con una motivación de ganar en salud y bienestar, seguirán creciendo al mismo ritmo.
Mientras las prácticas deportivas decrecen con la edad, el hábito de caminar y pasear ha aumentado de forma considerable y más después de la pandemia. Ya se veía venir que la situación de aislamiento en los hogares, y la adaptación por fuerza a pequeños espacios tenía que traer una nueva mentalidad, de libertad de movimiento y de una forma reglada. Mucha gente cogió la bicicleta, o se calzó las zapatillas de deporte y salió a disfrutar al aire libre.
