El Barcelona logró ayer una gran victoria en el Palau Blaugrana (81-80), en el primer partido de la final de la Liga ACB ante un Real Madrid que dominó buena parte del partido, pero que al final se vio sorprendido por un rival inmenso, lleno de rabia y orgullo. Los locales remontaron 12 puntos en 10 minutos y consiguió que la victoria se quedara en casa con un triple sobre la bocina y en carrera del base Marcelinho Huertas, que hasta entonces no había anotado.
En un último cuarto de infarto, el bloque que dirige Xavi Pascual se creció y, enfadado con ellos mismos, sacaron un orgullo ‘culé’ que les llevó a remontar los 12 puntos iniciales de desventaja con que empezaron los 10 minutos finales. Fueron más duros en defensa, pusieron agallas en ataque y asustaron a un Real Madrid que había trabajado mucho y bien para llevarse el primer partido. El próximo envite se disputará mañana en el feudo del conjunto catalán a partir de las 22,00 horas.
