Era cuestión de tiempo que una Gimnástica Segoviana que estaba mostrando buenas sensaciones pese a no ganar partidos, terminara saliendo de la mala racha y volviera a sumar de tres en tres. Tuvo que hacerlo en su hasta la fecha inexpugnable feudo del campo de La Albuera, donde el equipo azulgrana borró del campo a un CD Coria que llegaba a Segovia arropado por un buen grupo de aficionados y con la vitola de conjunto más que solvente para la categoría, y que se marchó pidiendo disculpas a sus seguidores por la imagen ofrecida.
Cuando existe una superioridad tan grande como la que mostró el equipo azulgrana frente al extremeño, lo normal es que esto se produzca por un cúmulo de circunstancias. Y si bien es cierto que el Coria llegaba a La Albuera con algunas bajas más otros jugadores importantes que salían de lesiones, no es menos cierto que la Segoviana también las tiene, y no menores con Acuña y Plomer en la grada, pero que ha encontrado en el desparpajo de Pablo Arranz una solución más que efectiva para el asunto del ataque.

ARRANZ PUDO CON TODOS

Porque el insultantemente joven futbolista vallisoletano que jugó el año pasado en el juvenil azulgrana fue el mejor de una primera de la parte en la que acaparó todas las acciones peligrosas de una Segoviana que tardó muy poco en pisar el área del Coria, para no abandonarla prácticamente en todo el encuentro. La banda derecha gimnástica era un filón, con Arranz superando una y otra vez a un Joserra que tardó muy poco en ganarse una amarilla, y por ese lado del campo aparecieron Ivo, Gómez y Borrego para percutir una y otra vez sobre el marco de Diego, el mejor de su equipo que tuvo como aliado al poste en una primera ocasión de Ivo, sacó un duro remate de Borre, vio cómo un cabezazo de De Frutos se iba fuera por poco y recibió un gol, bien anulado por fuera de juego, en apenas veinte minutos de vendaval gimnástico, solo frenado por una asistencia médica a De Frutos y la lesión del central Mahíllo.

RAMSÉS: “No hemos dejado al rival hacer nuestro juego y posiblemente ha sido uno de nuestros mejores partidos. La clave ha sido meter los goles, ni más ni menos”

El Coria sabía por dónde le venían los problemas, pero no era capaz de solucionarlos. Con balón no daba tres pases seguidos, ahogado por la presión de la Segoviana. Sin él se defendía en bloque bajo, pero se mostraba como un equipo ciertamente despistado en los saques de banda rápidos que efectuaba el equipo de casa. En uno de ellos, Rubén envió rápidamente a Ivo que le devolvió la pelota, y la puso en el área donde Borrego encontró el metro libre suficiente para cabecear de manera espectacular al palo largo de la portería cacereña y marcar el primer gol del partido, que acababa con los fantasmas de otro buen trabajo, pero sin gol.

BORRE SE UNE A LA FIESTA

Intentaba el conjunto visitante parar el partido como fuera, intentando meter a la Segoviana en el ‘otro fútbol’ que suele practicarse cuando hay que evitar que te pasen por encima. A punto estuvo de lograrlo en una acción en la que De la Mata y Rubén vieron la amarilla en una jugada en la que también vio la amonestación el visitante Deco, pero en cuanto volvió a serenarse el juego Rubén en un lanzamiento de falta, y De Frutos rematando fuera otra acción a balón parado elevaron el número de ocasiones locales haciendo corto el 1-0 con el que los dos equipos se marcharon a los vestuarios.
La segunda parte se prolongó durante 48 minutos según el cronómetro del árbitro, pero en realidad duró poco más de un cuarto de hora, porque el Coria tardó en comparecer al campo lo justo como para que Borrego le robara le cartera y los donuts a Melli en una salida de pelota horrible por parte visitante, y Gómez aprovechara el trabajo de su compañero para marcar casi a placer el 2-0.

ALBERTO URQUÍA: “Los dos goles de la Segoviana en el inicio de la segunda parte han matado el partido. pocas conclusiones positivas puedo llevarme, y me duele sobre todo por la afición que nos ha acompañado”

Y cuando los extremeños comenzaban a darse cuenta de lo que se les podía caer encima si no se ponían las pilas en el campo, Borrego cogió un balón en la banda izquierda y conectó con Gómez, que de espaldas sirvió a De la Mata, quien mejoró todavía más la jugada cediendo a Arranz, que dentro del área y con la pierna derecha puso el esférico a guardar lejos del alcance de Diego, culminando una espectacular jugada del ataque local.

Y DE POSTRE, UNA EXPULSIÓN

Pocos minutos más tarde, Pedro Melli culminó la mala tarde del Coria autoexpulsándose al protestar de manera vehemente una falta (que era) de Sergio Arévalo que le sujetó lo justo para que no llegara a un envío en profundidad. Fue la viva imagen de la desesperación del equipo de Alberto Urquía ante una Segoviana que, curada de espanto tras el partido frente al Leganés B, no aflojó el ritmo más que cuando las piernas de los futbolistas dijeron basta.
Fer Llorente dispuso de las últimas ocasiones gimnásticas, pero sus lanzamientos desde fuera del área no encontraron su destino. Ramsés refrescó todo lo que pudo al equipo con los cambios, protegió a todos los que tenían amonestaciones aunque Javi Marcos vio la quinta y será baja ante el Montijo, y celebró como el que más la victoria más clara de la temporada, que sumada a los tres empates anteriores hace que la Segoviana sume cuatro partidos seguidos sin perder. ¡Qué cosas!