La Asociación de Camareros de Segovia lo ha vuelto a hacer y por cuarto año consecutivo se celebra el Congreso de Turismo y Gastronomía ‘Ciudad de Segovia’, centrado en esta ocasión en el turismo religioso y enológico, dos aspectos fundamentales que ofrece la provincia a los visitantes y que los profesionales del sector quieren poner en valor.
El Congreso fue inaugurado ayer por el director general de Turismo de la Junta, Javier Ramírez, quien felicitó a la asociación dirigida por Pablo Martín por la organización de este evento y destacó “la importancia que tienen la restauración y la hostelería en el desarrollo económico de nuestra Comunidad”, de hecho, cifró el impacto económico de ambos en 29,5 millones de euros en la provincia de Segovia, algo que no sería posible, señaló, sin el buen trabajo que desarrollan los profesionales de sala, los sumilleres y todo el personal implicado en la marcha de los negocios.
Ramírez elogió también el tema escogido para desarrollar el Congreso este año, pues “tenemos eventos fundamentales de turismo religioso, como la Semana Santa o las Edades del Hombre (…) Solamente el tirón turístico que tiene la celebración de las Edades del Hombre supone colocarnos en una posición de privilegio. Y eso por no hablar de un evento, que más que un evento es una manifestación cultural y artística, en el que somos líderes, como es la Semana Santa. Somos la Comunidad que tiene más declaraciones de Interés Turístico Internacional y eso hay que hacerlo valer”.
En cuanto al enoturismo, destacó que las rutas del vino son “marcas de referencia y formas de atracción turísticas que aglutinan todos los recursos en el ámbito patrimonial, de la naturaleza, de la gastronomía, de productos especializados, etcétera, como por ejemplo las rutas del vino que tienen unos datos magníficos también de visitantes, no sólo a las bodegas, sino también a museos, en alojamientos… Se aglutina la oferta bajo marcas y referencias turísticas y Castilla y León es la Comunidad con más rutas del vino certificadas en España”.
Sin embargo, añadió Ramírez, estos buenos datos —con un crecimiento superior al 35% en el primer trimestre en pernoctaciones de turismo rural de Castilla y León, según los últimos datos datos del INE— no deben llevar a la relajación del sector, sino que “hay que seguir trabajando en esa línea y en la colaboración de instituciones y empresarios, para ganar la batalla del gasto turístico y del impacto económico y componiendo una serie de retos de futuro entre los que está convertir todos esos buenos datos y esa buena evolución en la generación de actividad económica y creación de empleo en el ámbito turístico”.
También hay que trabajar para conservar la imagen que los turistas se llevan de Castilla y León, dijo, muy buena y con un grado de satisfacción elevado. De hecho, destacó, gran parte de esta responsabilidad está en los profesionales de los servicios de hostelería y restauración, que consiguen una gran puntuación en lo que a atención se refiere y recordó “el papel de Segovia y provincia en el desarrollo del turismo gastronómico, que aquí se ofrecía antes de que tuviera nombre y siempre basado en la calidad”. Pero, reiteró, “no hay que relajarse. Hay que tener capacidad para convertir los buenos datos de turismo en generación de empleo y en dinamización del medio rural”.
Insistió en la importancia del sector agroalimentario Francisco Vázquez, presidente de la Diputación, quien recordó que son ya 258 las empresas segovianas adscritas a la marca ‘Alimentos de Segovia’. “Estos productos deben estar y viajar fuera de nuestras fronteras, pero deben servirse también en nuestro bares, restaurantes, hoteles y casas rurales. Y es ahí donde los profesionales de sala tienen mucho que decir, porque nadie mejor que ellos para vender las excelencias de nuestros productos y para ofrecer un buen servicio a nuestros turistas”, destacó.
Del mismo modo, apuntó que “pocas provincias como Segovia presentan una tan amplia variedad de iglesias, conventos y monasterios, de distintos estilos y ubicados en enclaves únicos (…) y pocas provincias pueden presumir de contar con vinos adscritos a cuatro denominaciones de origen: Rueda, Ribera del Duero, Valtiendas y Vinos de Castilla y León”.
Claudia de Santos, concejala de Patrimonio Histórico y Turismo del Ayuntamiento de Segovia, ensalzó también las virtudes de los monumentos religiosos con los que cuentan la ciudad y la provincia y aseguró que al Ayuntamiento le gustaría poner en marcha una ruta por los templos románicos, muy característicos del patrimonio segoviano, pero para ello “hay que trabajar con el Obispado, que es el gestor de estos recursos. En Turismo de Segovia llevamos muchos años intentando crear esta ruta, pero es complicado, porque la apertura es muy temporal, en épocas concretas, porque la Iglesia no tiene recursos; y porque tampoco son iglesias que puedan estar abiertas al albur de la gente que vaya a entrar, porque hay problemas como los robos. Las iglesias son un bien que necesitan una gestión, una vigilancia… y hace que la creación de ese producto sea más complejo, pero llegaremos, sin duda”.
En cuanto a la organización del Congreso de Turismo y Gastronomía, el presidente de la Asociación de Camareros, Pablo Martín, reconoció que “es una apuesta arriesgada, porque las dificultades económicas persiguen a esta asociación. Pero seguimos apostando por el turismo, porque es el motor económico de Segovia”. Así que pocos dudaban ayer de que el éxito de esta cuarta edición del Congreso impulsará una quinta el año que viene.
