Después de un año intenso en lo que a trabajo se refiere, Marian Rueda hace balance de un 2022 “en el que hemos podido recuperar muchas actividades deportivas”, pero en el que se sigue poniendo en el debe la lentitud a la hora de afrontar las inversiones en instalaciones deportivas, “porque hay que ser conscientes de que estamos dentro de una administración y que las velocidades son las que son. Los procesos en las administraciones públicas son más garantistas y por ello más lentos”.
P.- ¿Se ha recuperado el deporte popular?
R.- Creo que aún nos queda porque siempre hay aspectos que mejorar. Se han recuperado cifras en juegos escolares y municipales, pero las ambiciones del Ayuntamiento van un poco más allá del deporte popular. También en lo referente a ‘deporte rendimiento’, deporte espectáculo o inversiones deportivas estamos deseando seguir en la mejora.
P.- ¿En el apartado de instalaciones deportivas, el 2022 ha sido un año de ‘impass’ en cuanto a grandes inversiones, pero de trabajo duro en lo que a mantenimiento de pequeñas instalaciones se refiere?
R.- Siempre se pueden crear instalaciones, pero lo más difícil es el mantenimiento de las mismas. Tenemos una serie de inversiones que ya se han culminado, y otras que están todavía en marcha y que tendremos que trabajarlas en 2023. Es el caso de la pista de Zamarramala en la que estamos haciendo un arreglo del equipamiento y del solado. También está la pista polideportiva de La Albuera que ya existió en su momento con el nombre de ‘Las Calaveras’ y que tenemos en vías de construcción en una zona que queremos seguir mejorando. Hay pendiente en contratación la pista de ‘Fun Track’ para deportes de ruedas, y tenemos en la rampa de salida el proyecto del módulo cubierto de atletismo, que estamos deseando de poder darle la orientación final.
“Cuando la piscina climatizada funciona, todos estamos más tranquilos. La nueva caldera gasta un 20 por ciento de lo que se consumía antes”
P.- ¿Ha respirado tranquila cuando se ha culminado el cambio de caldera de la piscina climatizada?
R.- Sí, sin duda. La piscina es una instalación muy compleja en lo que a mantenimiento se refiere, con unas máquinas que llevan trabajando durante casi 25 años en unas condiciones que hace ver que su vida útil ya había terminado. El cambio de caldera ha ido bien, se han ajustado casi todas las temperaturas y aunque estamos en período de ajustar la temperatura de medio ambiente, eso no afecta a la apertura de la piscina y a que se pueda dar servicio a los usuarios. Cuando la piscina funciona todos estamos más tranquilos.
P.- ¿El incremento del gasto de combustible ya se ha asumido en los presupuestos?
R.- Esperamos no tener más sorpresas en ese sentido porque el 2022 fue un año complicado y algunas de las facturas se dispararon. El coste de combustible se ha estabilizado e incluso está bajando en algunos momentos, y también estamos esperando a podernos sumar al contrato que firme el Ayuntamiento para conseguir un mejor precio. Intentaremos acogernos a ese nuevo ‘fijo’ con el Ayuntamiento que supondrá una bajada en el coste del combustible. Y la reposición de la caldera va a ayudar a minorar ese gasto, porque el rendimiento de esta nueva caldera puede suponer un veinte por ciento de lo que se estaba gastando hasta ahora.
P.- ¿Avanza el proyecto de remodelación del campo de La Albuera con los fondos europeos?
R.- Estamos esperando a su resolución. Aportamos la documentación que se nos requirió en su momento y aunque siempre parece que falta alguna cosa, la hemos aportado al igual que lo hemos hecho con el proyecto de la piscina cubierta. Ya se debería de haber resuelto qué instalaciones entraban en estos fondos y cuáles no, y tengo la sensación de que si esta resolución no ha llegado ha sido porque se han encontrado con muchas más peticiones de las que en un principio pensaban y han tenido que aumentar el personal y las valoraciones. Confío que en el primer trimestre de 2023 tengamos ya la resolución y podamos acometer las mejoras.
P.- Carrera Fin de Año. ¿Tiene la sensación de que la organización se vio algo superada por la avalancha de gente?
R.- Es cierto que al principio, sobre todo con las carreras de niños, había mucha gente en la Plaza Mayor. Los niños van acompañados de adultos, no saben bien desde dónde salen, adónde llegan, y hubo por momentos esa sensación de que había poco espacio y mucha gente. Tuvimos la previsión de entregar a los niños unas pulseras para el caso de que alguien se extraviase, había policías y voluntarios, y salvo algún momento puntual se consiguió salir adelante. El ambiente deportivo fue muy grande pero se nos desbordaron las expectativas con mucha gente alrededor de esas carreras de menores. Y ya se sabe que hay muchas personas que respetan que haya que esperar para cruzar de un lado a otro, o esperar en una zona determinada, y hay otras a las que les cuesta un poco más respetar eso.
“Fue un acierto concentrar la carrera de fin de año en la Plaza Mayor, aunque por momentos vimos que había poco espacio y mucha gente”
P.- ¿Es decir, que en su opinión fue un acierto concentrar todas las carreras en la Plaza Mayor en lugar de poner la llegada de la prueba grande en la Plaza Mayor y las pequeñas en el Azoguejo?
R.- Creo que lo fue, aunque tenemos que pulir una serie de aspectos para evitar esos momentos de tensión. Tomaremos nota para evitar esos momentos.
P.- A la legislatura le quedan cinco meses. ¿Qué va a hacer Marian Rueda?
R.- Se acaba la legislatura, cierto, pero tenemos muchas cosas por hacer. Y hasta el último día voy a seguir dando todo por el deporte y por Segovia. Tengo un equipo numeroso y muy eficiente y queremos culminar todo lo que no hemos podido acabar este año. Es año electoral, y por lo tanto muy movido, y hay que saber dar los relevos. Lo que puedo asegurar es, sin saber lo que va a suceder, que seguiré vinculada al deporte de una u otra manera.
