Ayer se celebró en Fuentepelayo la tradicional Muestra de Villancicos que convoca y organiza la Asociación ‘Taller Cultural de Fuentepelayo’ en su cuadragésima edición con la implicación de la Fundación Caja Cega / Cajaviva, Diputación Provincial, Ayuntamiento del Fuentepelayo y Alimentos de Segovia.
Mención especial honorífica merece el voluntariado, que llevó a cabo una labor encomiable de servicio a la causa.
Sería injusto tratar de reservar calificativos para definir un acontecimiento de este calibre. Para saber realmente el significado de esta concentración en torno a los villancicos se podría preguntar a cualquiera de los seiscientos participantes. Las opiniones serían unánimes en destacar la calidad artística de los grupos, el ambiente convivencial, la tónica festiva de la jornada y el cariño que ofrecen los organizadores.
En esta ocasión concurrieron a la cita los siguientes grupos procedentes de Segovia: Ntra. Sra. de la Esperanza, Fray Juan de la Cruz, Cooperativa Alcázar, Cruz Blanca, Coral En Femenino Plural, Residencia el Sotillo y San José. Fuentepelayo presentó cinco colectivos: Voces de Ángeles, CRA Las Cañadas, Coralex, EvocHuarte y Rondalla Taller Cultural. Zarzuela del Pinar también tuvo doble representación con el grupo Zarzuela y el Centro escolar.
También se contó con la participación de cantores de: Nava de la Asunción — Coral Avaned—, Cuéllar —Fundación Personas—, CRA Los Llanos —Valverde del Majano—, Sanchonuño —Coro Parroquial—, Santiuste de San Juan Bautista —A.M.P.A.— y Navalmanzano —Sueños de Infancia y Vida—.
Como grupo invitado acudió el cuarteto ‘Trovadores’ compuesto por profesionales de la educación especial de la provincia de León — La Bañeza, Jiménez de Jamuz, Astorga y Alcaidón de la Vega—.
Igualmente, hay que destacar la participación de escolares de Escalona del Prado, Aguilafuente, Lastras de Cuéllar, Zarzuela del Pinar, Fuentepelayo, Aldea Real, Abades y Hontanares de Eresma.
Se vivieron momentos entrañales de evocación de las primeras ediciones de esta Muestra con la actuación de un coro formado por trabajadores del C.E.E. Huarte S. Juan.
Con la iglesia de Santa María la Mayor abarrotada de espectadores y contando con la colaboración de la inmensa mayoría de cantores de los distintos grupos participantes se cantó al unísono el tradicional villancico “Noche de Dios” en una demostración de emoción contenida y con la memoria puesta en las cuarenta ediciones celebradas.
Las autoridades provinciales y locales, así como los representantes de la entidades e instituciones colaboradoras entregaron las cerámicas conmemorativas diseñadas especialmente para la ocasión por el artesano segoviano Chema Gil. La Plaza Mayor de Fuentepelayo, pese a encontrarse en obras, era un hervidero de gente disfrutando de una chocolatada ofrecida por el afamado churrero Rodolfo San José de Santa Mª de Nieva. Las calles de la villa empezaban a recobrar su aspecto habitual con un manto de humedad ocasionada por la lluvia cuando se dio por finalizada esta edición tan especial de la Muestra de Villancicos y todos los participantes regresaban a sus lugares de origen.
